A pesar de las tensiones por las que
está pasando la Sanidad, parece que estos hechos no se reflejan en el absentismo laboral. Las enfermedades profesionales causadas por
agentes físicos son la principal razón por la que los sanitarios
piden la baja. Concretamente, son responsables del
46 por ciento del absentismo médico, tal y como muestran los datos ofrecidos por el Observatorio de Contingencias Profesionales de la Seguridad Social. Además, en estas cifras también se puede ver como los sanitarios están entre las primeras profesiones que faltan al trabajo debido a problemas causados por
agentes biológicos y a patologías de la piel provocadas por sustancias.
Por lo tanto, si se analizan el número de partes comunicados con baja distribuidos por patologías se observa que en el apartado de 'Actividades sanitarias y Servicios Sociales' el
total de 237 se divide de la siguiente forma: enfermedades profesionales causadas por agentes físicos como
ruidos, malas posturas o radiaciones (108); causadas por agentes biológicos como infecciones (70); enfermedades de la piel causadas por sustancias y agentes no comprendidos en alguno de los otros apartados (51); las provocadas por
agentes químicos (5); causadas por inhalación de sustancias y agentes no comprendidas en otros apartados como
polvos y metales (3); enfermedades profesionales causadas por agentes carcinógenos como amianto o arsénico (0).
Respecto a la
distribución por sexos, las
mujeres suponen un mayor número debido a la feminización del sector. En los 172 partes que recoge el
Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, hay 135 de mujeres (99 sin baja y 35 con baja) y 37 de hombres (21 con baja y 16 sin baja).
Posible aumento de las bajas
De manera general, la Seguridad Social especifica que la evolución de los partes comunicados se ha
reducido en los últimos 15 años aunque esta tendencia puede cambiar. En 2007 era de 11.425 bajas, mientras que en 2022 fueron 9.626, y en los primeros cuatro meses del año
son de 3.392. Es decir, si se mantiene esta aumento se superarían las cifras del pasado año y se llegarían a
datos anteriores a la pandemia, puesto que en 2019 hubo un récord con
12.877 notificaciones, con una escalada exponencial en 2017 y 2018. Por otro lado, los años que menos que menos partes hubo fueron 2012 (7.466) y 2013 (7.599).
Si se observan las otras profesionales, los que más bajas presentan son los trabajadores asalariados de los
servicios de restauración; los dependientes en tiendas y almacenes; los trabajadores en obras estructurales de
construcción y afines; los de la industria de la alimentación, bebidas y tabaco; los de la madera, textil, confección, piel, cuero, calzado y otros operarios en oficios; los
operadores de instalaciones y maquinaria fijas; los montadores y ensambladores en fábricas y personal de limpieza.
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