Víricö

Un experto analiza los errores en los que suelen incurrir las productoras a la hora de reflejar a los médicos residentes

Estos son los errores más típicos que se cometen a la hora de reflejar a los MIR en la televisión, según la academia CTO.
Residentes MIR.


8 sept. 2024 12:00H
SE LEE EN 3 minutos
El frenesí por las series de hospitales ha vuelto a florecer con Respira, ficción que pone el foco sobre las carencias de la sanidad pública y en la que los MIR tienen una presencia destacada. Por supuesto, los facultativos en formación son una figura recurrente en este tipo de producciones, e incluso ha habido quienes han intentado centrar en ellos la trama (ejemplo claro es el Médico Interno Residente por el que apostó Telecinco en 2007, que sin embargo naufragó en la segunda temporada). La proyección que se hace de los MIR en la pequeña y la gran pantalla, en cualquier caso, no siempre es fiel a la realidad. “Siempre se cae en los mismos errores”, apunta Antonio Martín, coordinador del claustro de tutores de la academia CTO, quien considera que las series acostumbran a reflejar a jóvenes algo “inmaduros, frívolos” y con una tendencia “fácil” hacia las “relaciones afectivas o sexuales”. 

En declaraciones a Redacción Médica, Martín recalca que las actitudes y actuaciones de los MIR en series y películas están dirigidas hacia el dramatismo y se alejan de las prácticas cotidianas de estos trabajadores. “Estamos hablando de médicos que ya están en residencia y que son personas serias, trabajadoras y constantes, aunque a veces se da una imagen más frívola”, afirma el dirigente de esta academia MIR y EIR. 

En este sentido, incide en que en muchas ocasiones los MIR de la ficción “son demasiado superficiales” y tienden a “caer en las relaciones de tipo afectivo o sexual” con facilidad. “Es cierto que son médicos jóvenes y lógicamente se relacionan con sus correspondientes, pero realmente ese continuo de relaciones personales afectivas es marginal –explica-. Las series, lógicamente, le dan más importancia para dar un contenido visible”. 

Subraya, en esta línea, que los residentes “son personas que con 25 años entran en un hospital tras haber estudiado seis o siete años tras un MIR brillante” y que “en su día ya fueron los mejores de la EBAU”. “Hablamos de personalidades muy comprometidas, serias, estudiosas y constantes, pero a veces se da la impresión de que son personas “sacadas de la discoteca con traje de médico”. 

Relaciones muy jerárquicas con los jefes


Otro problema, señala Antonio Martín, es que los MIR tiene a menudo una relación “demasiado jerárquica” con sus jefes, lo que da una imagen de que “hay que darles demasiada supervisión”. “Es como si fueran demasiado niños, no médicos”, desliza. A ello añade ciertos errores técnicos, como el constante desuso de mascarillas en el quirófano (los actores acostumbran a ponérselas debajo de la nariz). 

Respecto a la visibilidad de los MIR en las series, considera que el colectivo no solo no está infrarrepresentado, sino que además “suele tener bastante cabida”. “Tengamos en cuenta que los jóvenes son los que tienen más tirón desde el punto de vista de una serie de televisión”, sostiene el dirigente de CTO, que entiende por ello que la figura del asesor médico “es clave” en este tipo de proyecciones. 

En primer lugar, para aportar información sobre los casos clínicos y las enfermedades que aparecen en pantalla, pero también para reflejar con cierta fidelidad el día a día de los profesionales de un hospital. “Luego la productora cambia lo que considere por audiencia”, concluye.  
¿Quieres seguir leyendo? Hazte premium
¡Es gratis!
¿Ya eres premium? Inicia sesión
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.