Un estudio asocia la salud cardiovascular con la esperanza de vida libre de enfermedades crónicas

MADRID, 10 (EUROPA PRESS)

Un estudio de 135.199 adultos de Reino Unido, realizado por la Universidad de Tulane en Nueva Orleans (Estados Unidos), y publicado en 'Jama Network', revela que un alto nivel de salud cardiovascular (CVH, por sus siglas en inglés) se asocia con una esperanza de vida sustancialmente mayor libre de cuatro enfermedades crónicas principales como la enfermedad cardiovascular, la diabetes, el cáncer y la demencia, tanto en hombres como en mujeres.

El estudio se ha realizado con adultos del estudio UK Biobank y también muestra que la esperanza de vida libre de enfermedades crónicas fue similar entre los grupos socioeconómicos bajos y los demás entre los participantes con una salud cardiovascular alta.

La expectativa de vida promedio ha aumentado sustancialmente en las últimas décadas en la mayoría de los países industrializados pero, sin embargo, no todo el aumento de la esperanza de vida se está gastando con una salud óptima, especialmente entre las personas con un nivel socioeconómico bajo. En este sentido los nuevos descubrimientos revelan que mantener una buena salud cardiovascular puede garantizar una esperanza de vida sustancialmente más larga.

De los 135.199 adultos analizados, a los 50 años el tiempo sin enfermedad estimado fue de 21,5 años, 25,5 años y 28,4 años para hombres con niveles bajos, moderados y altos de CVH, respectivamente. Para las mujeres estas cifras fueron 24,2 años, 30,5 años y 33,6 años, respectivamente.

Los hombres con niveles de CVH moderados o altos vivieron en promedio cuatro o 6,9 años más libres de enfermedad crónica, respectivamente, a la edad de 50 años, en comparación con los hombres con niveles bajos de CVH. Los años correspondientes más largos vividos sin enfermedad para las mujeres fueron 6,3 o 9,4 años.

Estos resultados respaldan la mejora de la salud de la población mediante la promoción de un nivel elevado de salud cardiovascular, lo que también puede reducir las disparidades sanitarias asociadas al estatus socioeconómico.