Un estudio con datos de 8.000 personas encuentra el efecto protector entre aquellos con alta actividad física

El ejercicio baja el riesgo de depresión en personas con tendencia genética
Tanto las actividades de alta intensidad como las de baja se relacionaron con la disminución del riesgo.


31 oct. 2019 18:45H
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El aumento de los niveles de actividad física puede reducir significativamente las probabilidades de depresión, incluso entre personas que están genéticamente predispuestas a padecerlo, según un nuevo estudio de investigadores de Hospital General de Massachusetts (MGH).

En un artículo publicado en la revista Depression and Anxiety, el equipo informó que las personas que realizaban al menos unas horas de ejercicio cada semana tenían menos probabilidades de ser diagnosticados con un nuevo trastorno de depresión

Este nuevo estudio es el primero en mostrar cómo la actividad física puede influir en la depresión a pesar del riesgo genético. Para llegar a las conclusiones, recurrieron a datos de registros de salud de casi 8.000 participantes inscritos en el Partners Healthcare Biobank.

Los investigadores siguieron a pacientes que completaron una encuesta sobre sus hábitos de estilo de vida (incluida la actividad física) cuando se inscribieron en el Biobanco. Después, durante los siguientes dos años, extrajeron datos del registro e identificaron a las personas que recibieron diagnósticos relacionados con depresión. También calcularon las puntuaciones de riesgo genético de cada participante.

Los niveles altos de actividad física protegían 


Así, encontraron que las personas con mayor riesgo genético tenían más probabilidades de ser diagnosticadas con depresión en los siguientes dos años. En cambio, las personas que eran más activas físicamente fueron menos propensas a desarrollar depresión, incluso teniendo en cuenta el riesgo genético.


"Unos 35 minutos adicionales de actividad física cada día pueden ayudar a reducir el riesgo"


Además, los niveles altos de actividad física protegían a aquellas personas con los puntajes de riesgo genético de depresión más altos.

"Nuestros hallazgos sugieren fuertemente que, cuando se trata de depresión, el estar físicamente activo tiene el potencial de neutralizar el riesgo adicional de episodios futuros en individuos que son genéticamente vulnerables", ha señalado Karmel Choi, de la Harvard T.H. Chan School of Public Health y autor principal del estudio.

Actividad de alta y baja intensidad 


"Aproximadamente unos 35 minutos adicionales de actividad física cada día pueden ayudar a las personas a reducir su riesgo y protegerse contra futuros episodios de depresión ", ha añadido. 

Los investigadores encontraron que tanto las formas de actividad de alta intensidad (como el ejercicio aeróbico, la danza y las máquinas de ejercicio), como las formas de menor intensidad, (yoga o estiramientos, por ejemplo), se relacionaron con una disminución de las probabilidades de depresión.

La depresión representa la principal causa de discapacidad en todo el mundo. A pesar de su enorme carga de salud, ñas estrategias para combatirla siguen siendo limitadas. "Proporcionamos evidencia prometedora para que los profesionales de Atención Primaria y Salud Mental puedan aconsejar y ahcer recomendaciones a los pacientes para reducir su riesgo, incluso si tienen antecedentes familiares de depresión", ha añadido Choi.


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