La Unidad de Ginecología de HLA Montpellier incorpora a María José Bravo

La Unidad de Ginecología de HLA Montpellier ha incorporado a María José Bravo Zurita, Joven Experto de la Asociación Española para el estudio de la Menopausia (AEEM), una profesional con la que el centro "dará un valor añadido al servicio de Ginecología" con una facultativa "especialmente comprometida con esta etapa de la mujer", según han informado en una nota.

"Las revisiones ginecológicas periódicas son recomendables para el mantenimiento de la salud y calidad de vida de la mujer. Los especialistas recomendamos realizarlas al menos una vez al año”, explica Bravo. El principal motivo, entre otros, es la detección de forma precoz, antes de que aparezcan síntomas o en estadios iniciales, de patología ginecológica como cáncer de mama, cérvix o cuello de útero, vulva, ovarios o endometrio.

Como Joven Experto de la Asociación Española de la Menopausia (AEEM), Bravo explica que "la menopausia tiene lugar cuando la actividad ovárica cesa y los niveles hormonales disminuyen. Incluso antes de que se dejen de tener periodos menstruales, los cambios hormonales pueden dar lugar a algunos de los síntomas de la menopausia. Además de los ciclos menstruales irregulares, los síntomas más comunes son los sofocos, sudores nocturnos, problemas para dormir, y sequedad vaginal".

La menopausia es una etapa fisiológica de la vida de una mujer. Sin embargo, en ocasiones los síntomas asociados a la menopausia pueden afectar a la calidad de vida. "Una mujer de 45 años o más que no ha tenido un periodo menstrual en 12 meses, tiene una alta probabilidad de que tenga la menopausia. La gran mayoría no necesita ninguna prueba analítica para confirmarla, especialmente si tienen síntomas de la menopausia como los sofocos o la sequedad vaginal", apunta Bravo.

Por otro lado, no todas las mujeres necesitan un tratamiento para los síntomas de la menopausia, especialmente si estos son leves. De hecho, hay cosas que una mujer puede hacer por su cuenta que pueden ayudarle a aliviar los síntomas. Por ejemplo "si presenta sofocaciones y sudoración nocturna, mantenga una temperatura ambiente baja y evite las bebidas calientes, como café́ o té. Póngase una toallita fría y húmeda en su cuello durante los sofocos y no fume", puntualiza.

También cita los trastornos del sueño, en los cuales detalla que tendría que levantarse a la misma hora cada día, incluso cuando no se duerma bien, ya que la siesta puede empeorar el problema.

Para las mujeres cuyos síntomas son muy molestos, hay varias opciones de tratamiento disponibles, que su médico o ginecólogo le puede indicar en función de su historia clínica.  "Hay que tener muy en cuenta las revisiones periódicas con el ginecólogo, que son aún más importantes en esta etapa de la vida", finaliza.