Guía sanitaria de buenas prácticas frente a terapias de conversión Lgtbi

La apuesta de cinco de los partidos del bloque de investidura en el Congreso por criminalizar las terapias de conversión de personas Lgtbi ya es oficial. El Boletín Oficial de la Cámara Baja de este viernes incluye el texto de la Proposición de Ley firmada por Sumar, ERC, Bildu y el Grupo Mixto, del que forman parte Podemos y BNG. Entre otras cosas, en la propuesta se plantea añadir el artículo 175 bis al Código Penal para castigar con entre uno y cuatro años de cárcel, además de a una multa de entre ocho y 24 meses, a quienes practiquen estas terapias. Como alternativa a esas prácticas, los grupos parlamentarios quieren que las autoridades competentes en materia de sanidad elaboren, junto a profesionales de la Psicología y la Medicina, una guía de buenas prácticas para el tratamiento clínico y psicológico, así como para el “acompañamiento apropiado para las personas Lgtbi con conflicto con su orientación sexual”.

La tipificación del delito por practicar terapias de conversión quedaría encuadrada, según la Proposición de Ley, en el Título VII del Código Penal, que versa sobre las “torturas y otros delitos contra la integridad moral”. Por terapias de conversión se entendería “el asesoramiento, práctica o tratamiento de cualquier tipo -incluyendo, entre otras, las intervenciones médicas, psiquiátricas, psicológicas, sociales, familiares, clínicas, de acompañamiento o coaching, así como las religiosas o pastorales-, independientemente de los métodos, técnicas o enfoques que empleen, que tengan como objetivo modificar, disminuir, reprimir, desalentar o suprimir la orientación sexual, la identidad sexual y/o de género o la expresión de género de una persona”.

De ese marco se excluyen las “prácticas, tratamientos, terapias y cualquier otro tipo de asesoramiento o acompañamiento” con las que no se pretenda “forzar” ese cambio. De hecho, en la exposición de motivos se deja claro que, “de acuerdo con la literatura y a los estándares de cuidado establecidos por los colegios profesionales de psicólogos y médicos, las terapias de conversión son ineficaces” y, además, “presentan graves riesgos para la salud de las personas que las sufren”.

De acuerdo a los partidos firmantes, es algo que han ratificado “más de ochenta asociaciones profesionales de la salud, Medicina, Psicología y Psiquiatría de distintos países, que entienden la diversidad sexual y de género como expresiones normales dentro de la naturaleza, y recalcan expresamente que no son una patología, condición o trastorno que puedan ser modificadas”.

"Trato adecuado" a víctimas de terapias de conversión

Aparte de la reforma del Código Penal, en la propuesta legislativa se plantea modificar la Ley Trans. Es en ese cambio en el que quedaría encuadrado el mandato para que el Ministerio de Sanidad o, en su caso, las comunidades autónomas dentro de sus competencias en materia sanitaria, elaboren la guía de buenas prácticas para acompañar a las personas Lgtbi “con conflicto con su orientación sexual, identidad sexual y/o de género, expresión de género o características sexuales”.

Para ello se contará con la colaboración del Consejo General de la Psicología de España y del Consejo General de Colegios de Médicos de España, además de con la de “cualquier otra institución relevante”, de cara a atender “a los consensos científicos y profesionales imperantes a nivel internacional y nacional”. En el documento se “identificará claramente los límites y las formas de acompañamiento apropiadas de profesiones no reguladas o de acompañamientos espirituales”, y también contendrá “recomendaciones y protocolos de identificación y de trato adecuado a personas víctimas o potencialmente víctimas de terapias de conversión”.

De forma paralela, también se quiere poner en marcha un mecanismo de coordinación para que los centros de salud, y los de salud mental e internamiento “desarrollen protocolos estandarizados para garantizar que a las personas internas y a los pacientes no se les someta a terapias de conversión, así como para identificar este tipo de situaciones de violencia”.

El PSOE trabaja en su propia ley contra terapias de conversión

Llama la atención el hecho de que no figure la firma del PSOE en el texto presentado por la mayoría de sus socios de investidura, incluido su socio de Gobierno, Sumar. Es algo que desde el ala socialista se justificó arguyendo que su grupo parlamentario estaba trabajando en una propuesta legislativa propia. Tampoco aparece el PNV entre los firmantes, aunque los nacionalistas vascos anunciaron que apoyarían la propuesta en las Cortes.