Imagen de Katie de su perfil en Facebook.
El
riesgo de las pseudoterapias para atajar enfermedades como el cáncer ha vuelto a ponerse sobre la mesa con la
muerte de Katie Britton-Jordan, una británica que
rechazó tratarse con quimioterapia de
su cáncer de mama para entregarse a diferentes técnicas sin aval científico.
A través de su
página creada en Facebook, Britton-Jordan y su marido fueron narrando el día a día en su lucha desde que le fue detectado su cáncer, un tipo triple negativo que le diagnosticaron en periodo de lactancia de su hija. Se trata, según explicaba, de una de las
variantes más agresivas de este tipo de tumor, como le hicieron saber los médicos, pero la británica consideraba que la
quimioterapia envenenaba su cuerpo y prefirió apostar por una dieta basada en frutas y verduras, suplementos con algas marinas, cápsulas de pimienta negra y especialmente, tratamientos alternativos.
"He visto a amigos que reciben quimioterapia y se ven afectados de por vida. Es horrible. Estás envenenando tu cuerpo"
|
Así lo fue explicando en su página, donde colgaba fotos de su estancia en el
centro mexicano Hospital Médico del Noroeste para tratamiento alternativo del cáncer, según su nombre. Allí podía verse con los pies sumergidos en sales del Mar Muerto, saunas a 100 grados,
cámaras de oxígeno, terapia láser, terapia magnética (llamada par biomagnético) o con células dendríticas. Las fotos van acompañadas de numerosos sueros o compuestos colgados en el palo del suero con mensajes de ánimo o cariño pintados a mano por el personal del centro.
Para costear estos tratamientos, Britton-Jordan abrió una página de
microdonaciones y buscó la manera de recaudar la mayor cantidad de fondos posibles, llegando a sumar casi 20.000 libras. En otra actualización, incluso, admitió que le habían comentado los responsables del centro asistencial que
necesitaba 3 tratamientos extras que suponían un 'desembolso imprevisto' de
10.500 libras.
Pese a los esfuerzos económicos y en terapias alternativas, que le hacían debilitarse cada vez más y que propiciaron que en unos meses su tumor doblara su tamaño inicial, el pasado mes de mayo el
marido de Katie anunció su fallecimiento en la página de
Facebook. "Me rompe el corazón escribir esto, pero el sábado 25 de mayo, Katie, con la misma gracia y fuerza que ella misma manejó a través de la vida, pasó pacíficamente a la siguiente". La propia Katie nunca había mostrado signos de arrepentimiento de su decisión, ya que afirmó que "si recibiera quimioterapia, creo que estaría casi en la cama. He visto a
amigos que reciben quimioterapia y se ven afectados de por vida. Es
horrible. Estás envenenando tu cuerpo".
Las redes recuerdan la necesidad de recurrir a la ciencia
El caso de esta mujer de 40 años ha vuelto a encender las redes sociales, donde los detractores de las pseudoterapias han recordado una vez más que
confiar en estos tratamientos es un engaño, además de económico, moral. Una de las críticas han venido de
Lucía, mi pediatra, que ha recordado que "
ninguna dieta cura el cáncer. Ninguna. Distingamos entre prevención y curación, por favor. Que una
mujer joven muera por esta desinformación es un fracaso de todos".
También el usuario
Darth Listillo ha lanzado un hilo en Twitter donde además de recoger toda la historia de Katie, explica que su intención no es reírse de ella o de su elección, sino que "critico las
#pseudoterapias que lo único que hacen es dejarte seco económicamente mientras mueres. Katie pudo haberse tratado y tal vez lograr sobrevivir al maldito cáncer. Pero optó por usar la mentira en vez de la ciencia". Y aprovecha para recordar el caso de Carolina, una joven de Málaga con un tipo raro de cáncer que pedía incluso que experimentaran con ella en busca de una curación que le permitiera seguir disfrutando de la vida y que finalmente no llegó. "Por eso,
huid de las #pseudoterapias, de la #homeopatía, de todo aquel que quiere curarte con dietas detox o medicina natural. Lo único que quiere es tu dinero. Nada más", asegura.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.