Unas línea de producción de medicamentos.
La montaña rusa de cifras de la
industria farmacéutica en 2017 no cesa. La sucesión de crecimientos y caídas es la nota predominante en los indicadores del sector, y la capacidad de fabricación de las compañías no es ajena a este fenómeno.
Si en abril la producción de los laboratorios sufrió su mayor caída
desde 2012, en mayo se corrigió este rumbo con un crecimiento del 6,3 por ciento respecto al mismo mes de 2016, según el
Instituto Nacional de Estadística (INE).
Es más: respecto al mes de abril, la
producción de los laboratorios es la que más creció en el conjunto de la industria española. Lo hizo un 9,8 por ciento, por encima del sector de los automóviles (6,5 por ciento) y del tabaco (4,7 por ciento).
Fuentes de la industria consultadas por este medio reconocen desconocer el origen de este ascenso, igual que ignoran la causa de la vertiginosa caída de abril. Sin embargo, aseguran que la producción tiene escaso efecto sobre la facturación final de las compañías (que el INE mide mediante la cifra de negocio de los sectores).
En términos generales, la producción de medicamentos se ponga, en crecimientos, por encima de la media española. En total, la producción de la industria española creció un 4,6 por ciento anual y un 1,3 por ciento mensual.
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