La enfermedad hepática por depósito de grasa provoca cirrosis

La prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades hepáticas ha centrado gran parte del debate entre los especialistas que se han dado cita en la I Jornada de Actualización en Patología Digestiva, celebrada hace unos días en el Hospital Universitario Infanta Elena, integrado en la red sanitaria pública madrileña.

Especial atención generaron dos entidades dentro de este tipo de patologías: la enfermedad hepática por depósito de grasa como causa de cirrosis y las hepatitis virales. En el primero de los casos, los expertos destacaron su “elevadísima prevalencia en la población actual” y la importancia para su tratamiento de los “hábitos de vida saludables, como la pérdida de peso, la realización de ejercicio físico y el seguimiento de una dieta sana”, tal y como ha explicado María Delgado, jefa del Servicio de Aparato Digestivo del hospital y organizadora de la jornada.

En cuanto al segundo cuadro, actualmente existen tratamientos muy eficaces en las hepatitis virales, sobre todo en el tipo C (VHC), por lo que los esfuerzos en este caso deben centrarse en “tener una actitud activa desde los distintos niveles de atención médica en la detección de pacientes con el fin de intentar erradicar la infección en el caso de la VHC, y controlarla en el de la hepatitis B”, según han indicado Raquel Barranco y Raquel Rodríguez, especialistas del citado servicio que participaron en el encuentro. Junto a ellas, sus compañeras Inmaculada Chico y Rosmery Marruffo han analizado las claves del manejo de la esteatohepatitis no alcohólica (EHNA) y la hipertransaminasemia en Atención Primaria.

Abordaje de la enfermedad funcional

Otro tema que generó una interesante discusión fue la enfermedad funcional, en cuyo manejo sigue habiendo mucha “controversia”  y plantea un gran “reto” para los especialistas porque “no cuenta con un tratamiento específico y supone un volumen muy importante de pacientes en las consultas de Aparato Digestivo”. “Se trata de una patología a veces difícil de entender, en la que las pruebas realizadas son ‘normales’, pero que a menudo limitan mucho el día a día de nuestros pacientes”, ha insistido Delgado.

Además de la enfermedad funcional, teniendo en cuenta tanto el síndrome de intestino irritable como la dispepsia (de la que ha hablado María de Lucas Gallego, del citado servicio hospitalario), y la mencionada enfermedad hepática por depósito de grasa, la especialista incluyó también entre las patologías digestivas de mayor prevalencia la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) y la infección por Helicobacter Pylori, analizando en este último caso los últimos documentos de consenso y líneas futuras de tratamiento.

Igualmente, dentro de la mesa redonda dedicada a las patologías del tubo digestivo superior, Rosa Briz, especialista del Hospital Universitario Infanta Elena, ha expuesto las principales novedades registradas en el diagnóstico, tratamiento y seguimiento de los pacientes con esofagitis eosinofílica.

Sindrome de intestino irritable

Por su parte, en el encuentro centrado en el tramo inferior del tubo digestivo se ha hablado de la detección del síndrome de intestino irritable, criterios diagnósticos y tratamiento, poniéndose además de relieve la importancia de las medidas no farmacológicas en su manejo, como la dieta baja en Fodmaps (que excluye aquellos alimentos vegetales ricos en hidratos de carbono corta fermentables como los oligosacáridos, los disacáridos, los monosacáridos y los polioles).

Se trataron también temas en relación con la enfermedad inflamatoria intestinal, su seguimiento, vacunación, diagnóstico de brote y necesidad de revisión en Atención Primaria, los criterios para derivarlo a Atención Especializada, y el diagnóstico y seguimiento del cáncer colorrectal y los pólipos de colon. Todo ello de la mano de Daniel Alcalde, Almudena Clavache, María del Carmen López y Alonso Castillo, especialistas del Hospital Universitario Infanta Elena.

Las jornadas, en las que se dieron cita y participaron muy activamente profesionales de los dos niveles asistenciales y de diferentes especialidades, han permitido actualizar a todos conocimientos sobre las patologías digestivas más frecuentes, intercambiar ideas e impresiones al respecto y establecer y unificar protocolos de actuación, lo que, a juicio de su organizadora, se traduce claramente en “una mejor atención para nuestros pacientes”. Así, y tras realizar una valoración “muy positiva” del encuentro, Delgado espera ya poder repetirlo.