Los residentes se ven influenciados por factores que favorecen o disminuyen su nivel de esfuerzo.
La perseverancia, el empeño y la pasión que ponen los residentes durante su formación, puede sufrir alteraciones o una evolución según las circunstancias que afronten cada año. El
'Estudio longitudinal de la asociación entre la calidad de vida y la perseverancia en los residentes de Medicina Interna del Hospital Ramathibodi' en Tailandia, realizado por cuatro médicos académicos, tuvo como objetivo profundizar en los
posibles cambios en el nivel de perseverancia de los estudiantes de Medicina
en sus primeros tres años de formación MIR e indagar en la asociación que existe entre esta última y los niveles de estrés, calidad de vida y satisfacción de aprendizaje, durante un curso académico.
En ese sentido, se determinó que la
perseverancia disminuyó durante la formación de residencia de primer año y que se asoció de forma positiva con la calidad de vida, aunque esta -a su vez- se asoció negativamente con los niveles de estrés que enfrentaron. "Ciertas rotaciones se asociaron con menor perseverancia, menor calidad de vida y mayor estrés", indica la indagación entre sus conclusiones.
Y es que, según los resultados obtenidos, el arrojo de los residentes de primer año disminuyó significativamente ese periodo de su formación, algo que no pasó con los resultados de los
residentes de segundo año, que tuvieron una perseverancia constante
todo el curso.
En el caso de los
residentes de tercer año, esta aumentó debido a la experiencia laboral, lo que sugiere que la adaptabilidad de los residentes a las dificultades "relacionadas con
el trabajo mejoraba con la edad o la experiencia".
Además, la satisfacción autopercibida por cada residente también aumentó el nivel de perseverancia, lo que significa que las personas
más motivadas estaban más satisfechas con sus capacidades de aprendizaje. Un aspecto a resaltar, es que se encontró que los residentes que estaban en pareja, tenían puntuaciones más bajas porque "posiblemente" estar en una relación influyó en sus objetivos originales.
Lugar de residencia
El estudio también muestra que la vivienda influye positiva o negativamente en los estudiantes de Medicina y su relación entre la perseverancia y la calidad de vida. Por ejemplo, los MIR que vivían en sus hogares familiares
mostraron niveles de estrés más bajos en comparación con los que vivían en residenciales estudiantiles. Este es un aspecto que afecta, sobre todo, a los residentes que cambian de ciudades o países para realizar su especialización médica.
Recopilación de datos y participación
La indagación contó con la participación de
120 residentes de Medicina Interna del hospital tailandés,
inscritos en programas de formación de julio de 2022 a julio de 2023, pese a que en un inicio fueron 122. Uno de ellos decidió abandonar la capacitación, mientras que otro se negó a participar. No se consideró a los residentes de segundo y tercer año de las especialidades de Dermatología y Neurología, así como a los residentes de tercer año de Hematología y Oncología, que no forman parte del mismo régimen de formación.
La recopilación de datos se hizo
mediante cuestionarios, que incluyeron datos de edad, género, vivienda, experiencia laboral, carga financiera, estado civil, rotaciones, calidad de vida, puntajes de estrés, de satisfacción con el aprendizaje y de esfuerzo, durante cada tres meses. Estos se hicieron al
comienzo del año en formación y cada tres meses hasta el final.
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