Exteriores del Tribunal Supremo.
Una
estudiante de Medicina de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) ha sido condenada a
ocho meses de prisión y una multa de seis euros diarios por manipular las respuestas de un examen en el momento de la revisión. Supuestamente, cambió varias de las contestaciones que el propio día de la prueba había tenido mal.
El
Tribunal Supremo,
en una sentencia a la que ha tenido acceso
Redacción Médica, considera a la acusada autora de un delito de
falsedad en documento oficial.
Los hechos se remontan a
mayo de 2019, cuando la alumna se presentó a una prueba de la asignatura
'Anatomía III, órganos de los sentidos y neuroanatomía'. Ya durante el examen, la profesora se dio cuenta de que la acusada estaba intentando copiar las respuestas del resto de sus compañeros y decidió cambiarla de lugar en el aula. Posteriormente, cuando terminó el examen, fue la
docente la que decidió sacarle una foto al examen para tener pruebas de las primeras respuestas.
Cuando la alumna acudió a la revisión, cambió dos de las respuestas, algo que
se pudo comprobar gracias a esa fotografía que sacó la profesora el día anterior. Primero, modificó una sobre las parejas formadas por una arteria y una estructura irrigada por ella, añadiendo una respuesta nueva dentro de ese tipo 'test' y otra sobre las migraciones de los neuroblastos desde la matriz ventricular a la placa cortical. En esta última, el cambio fue en un
verdadero y falso. Unos hechos que los magistrados aceptan como constatados en su escrito.
La defensa alegó la "animadversión" hacia la acusada
Aunque los hechos se consideran probados por el
Tribunal, la defensa de la alumna alegó a una "
animadversión" hacia ella por haber denunciado la manipulación de los datos de sus notas en un curso anterior. Aunque, reconocían en el alegato, no se trataba de "
manía, sino de enemistades", con la única intención de expulsar a la alumna del centro "alegando la alteración de un examen cuyo original
nadie indica haber visto por la comparación de unas fotografías, más allá del testimonio de la catedrática que así lo manifiesta", añadían en un recurso que ya se ha rechazado.
Los magistrados consideran que la manipulación fue "
burda", y que los testimonios con los presentes no coinciden en ningún caso con las de la persona que ha puesto el recurso.
“Se produjo la falsificación en el examen por manipulación y modificación de dos preguntas del mismo”, sentencia el Tribunal Supremo.
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