Andalucía 
Cataluña 
Madrid 
C. Valenciana 
Galicia 
Castilla y León 
País Vasco 
Canarias 
C-La Mancha 
Murcia 
Aragón 
Extremadura 
Asturias 
Baleares 
Navarra 
Cantabria 
La Rioja 
La mascarilla es un elemento de protección complementario contra el nuevo coronavirus Covid-19. Por ello es importante utilizarla, sobre todo, cuando no se pueda respetar la distancia de seguridad interpersonal, ya sea en espacios cerrados o abiertos. No obstante, el Ministerio de Sanidad y el Ministerio de Consumo han redactado una serie de recomendaciones para los casos en los que se necesite hacer un uso intermitente de la mascarilla.
En primer lugar, para retirar la mascarilla, es importante hacerlo por la parte de atrás, esto es, sin que haya contacto con la parte frontal ni con la parte interior, más cercana al rostro. Previamente, se debe extremar la limpieza de manos para evitar cualquier contaminación.
Una vez se haya quitado, la mascarilla se debe guardar en un recipiente o bolsa de papel limpios hasta que se vuelva a hacer uso de ella. Además, es muy importante colocarla de tal forma que no se contamine la parte interior, pues es la que está en contacto con la cara.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) también han establecido una serie de pautas de cómo se deben guardar las mascarillas que se han humedecido o ensuciado con maquillaje, saliva o sudor. En este caso, se debe guardar en una bolsa de plástico hasta que se pueda lavar, en caso de que sea una mascarilla reutilizable. En este sentido, el CDC advierte que las mascarillas húmedas son menos eficaces que las que están secsa.
Si las mascarillas no están dañadas, el CDC insiste en colocarlas en una bolsa de papel para poder utilizarlas en otro momento. Esta bolsa debe estar seca y se recomiendan materialles como el papel o la tela de malla. Es importante que las mascarillas se usen siempre con el mismo lado hacia fuera.
Si es necesario retirarse la mascarilla para comer o beber, hay que procurar mantenerla en un lugar seguro para evitar que se contanime. Antes de colocarla de nuevo, se recomienda la higiene de manos antes de manipularla.
En primer lugar, para retirar la mascarilla, es importante hacerlo por la parte de atrás, esto es, sin que haya contacto con la parte frontal ni con la parte interior, más cercana al rostro. Previamente, se debe extremar la limpieza de manos para evitar cualquier contaminación.
Una vez se haya quitado, la mascarilla se debe guardar en un recipiente o bolsa de papel limpios hasta que se vuelva a hacer uso de ella. Además, es muy importante colocarla de tal forma que no se contamine la parte interior, pues es la que está en contacto con la cara.
Cómo guardar las mascarillas sucias
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) también han establecido una serie de pautas de cómo se deben guardar las mascarillas que se han humedecido o ensuciado con maquillaje, saliva o sudor. En este caso, se debe guardar en una bolsa de plástico hasta que se pueda lavar, en caso de que sea una mascarilla reutilizable. En este sentido, el CDC advierte que las mascarillas húmedas son menos eficaces que las que están secsa.
Si las mascarillas no están dañadas, el CDC insiste en colocarlas en una bolsa de papel para poder utilizarlas en otro momento. Esta bolsa debe estar seca y se recomiendan materialles como el papel o la tela de malla. Es importante que las mascarillas se usen siempre con el mismo lado hacia fuera.
Si es necesario retirarse la mascarilla para comer o beber, hay que procurar mantenerla en un lugar seguro para evitar que se contanime. Antes de colocarla de nuevo, se recomienda la higiene de manos antes de manipularla.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.
|