Sanidad identifica tres líneas rojas en la negociación de huelga en Aragón

La negociación en Aragón para evitar la huelga en sanidad convocada para el 31 de marzo por los sindicatos generalistas (CSIF, CCOO y UGT) sigue paralizada. Este jueves se han reunido el Servicio Aragonés de Salud y los representantes de los profesionales sanitarios en un encuentro que ha durado poco más de media hora y en que no se han producido avances.

La reunión parecía que iba a tomar otro sentido tras las palabras de este miércoles de la consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, que manifestó que "no hay objeción" a muchas de las reivindicaciones de estos sindicatos. No obstante, el Salud ha asistido al encuentro sin ninguna propuesta y ha avanzado que tiene que "estudiar" el documento que los sindicatos les presentaron hace algunos días. Según relata a Redacción Médica Jessica Fessenden, en representación de CSIF, la Administración ha identificado tres líneas rojas que se quedan fuera de la negociación: la jornada de 35 horas, la jubilación anticipada y la reclasificación profesional.

Los representantes sindicales mantienen la convocatoria de huelga y, aunque les parece bien que estudien sus propuestas, alegan que "no entendemos las declaraciones de la consejera". El único compromiso del Salud es que la semana que viene "remitirán un documento con un estudio de las reivindicaciones que hemos planteado, analizando las medidas que pueden abordar y entonces nosotros evaluaremos si son suficientes".

Además, los sindicatos generalistas, cuya representación es del 49 por ciento en la mesa sectorial, han avanzado que no acudirán a la reunión de este viernes en la que se ratificará el acuerdo que el Salud firmó con los sindicatos médicos Fasamet y CESM Aragón. CSIF, CCOO y UGT pidieron el aplazamiento de esta mesa sectorial porque entienden que "no corresponde" cuando se está negociando con un comité de huelga, que no han negociado ese documento y que ya se han puesto en marcha algunas de las medidas acordadas.