Jesús Aguirre, consejero de Salud y Familias de Andalucía.
29 sept. 2021 13:00H
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Las fundaciones públicas de investigación en Salud de Andalucía han realizado un total de 2.180 contrataciones desde 2018 hasta el momento actual, lo que refleja una tendencia general de crecimiento. Concretamente, son contrataciones de la Fundación Progreso y Salud, FIBAO, FIMABIS y FISEVI, dependientes de la Consejería de Salud y Familias.
En este contexto, desde el ejecutivo andaluz destacan que, durante el primer semestre de 2021, se han realizado 432 contrataciones, produciéndose un repunte importante que ha permitido alcanzar niveles superiores a los datos anteriores a la llegada del Covid. Si se compara el nivel de contrataciones del primer semestre de 2021 en relación al mismo periodo de 2018, se constata un incremento del 32%.
Estos datos se desprenden del Sistema de Información de la Secretaría General de Investigación, Desarrollo e Innovación en Salud sobre las contrataciones de personas investigadoras, realizadas por las fundaciones públicas de investigación de Andalucía
66 millones de inversión en investigación
El coste total de todas las contrataciones realizadas entre 2018 y 2021 asciende a cerca de 66 millones de euros, lo que muestra una idea de la importancia de la investigación en salud como factor de crecimiento económico. Asimismo, hay que subrayar que el porcentaje de mujeres contratadas durante todos estos años ha sido superior al de hombres, situándose la media en 60,5%, lo que confirma los resultados de las políticas de igualdad de género implantadas en Sistema Sanitario Público de Andalucía.
Junto a ello, la duración promedio de los contratos es de 12,6 meses, con un importe medio de 30.262 €, con una tendencia creciente a lo largo del tiempo en ambos indicadores.
En cuanto al origen de la financiación, la mayoría de las contrataciones, el 64,5 %, han sido aportadas con recursos procedentes de entidades privadas o públicas, nacionales y europeas, externas a la Junta de Andalucía. El restante 35,5% se ha financiado con fondos procedentes de las distintas consejerías, agencias u organismos autónomos de la Junta de Andalucía.
Finalmente, es de destacar que la investigación en salud en Andalucía es un motor generador de empleo, ya que genera más de 500 contratos públicos anuales, a los que hay que sumar los que se realizan desde entidades privadas, en los cuales se observa además un incremento en el número de contratos de carácter indefinido.
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