MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
Las mujeres con fibrilación auricular evolucionan más rápidamente hacia el deterioro cognitivo y la demencia que los hombres con este trastorno del ritmo cardiaco, según una investigación presentada en el congreso científico de la Sociedad Europea de Cardiología y publicada en la revista científica 'Alzheimer's & Dementia: The Journal of the Alzheimer's Association'.
Los síntomas de la fibrilación auricular en las mujeres suelen ser ignorados por los profesionales sanitarios o atribuidos al estrés o la ansiedad, por lo que puede quedar sin diagnosticar durante un largo periodo de tiempo, mientras que los hombres tienen más probabilidades de ser diagnosticados y tratados rápidamente.
"Estar sin diagnosticar significa no recibir medicación anticoagulante oral para prevenir los coágulos sanguíneos y los accidentes cerebrovasculares causados por la fibrilación auricular. Estas mujeres pueden tener coágulos que van a parar a pequeños vasos sanguíneos del cerebro, lo que les hace perder la función cerebral gradualmente y desarrollar deterioro cognitivo", ha advertido la autora del estudio, Kathryn Wood, de la Universidad de Emory (Estados Unidos).
Las directrices de la Sociedad Europea de Cardiología para el cuidado de pacientes con fibrilación auricular recomiendan anticoagulantes orales tanto para mujeres como para hombres. "Sin embargo, sabemos que las mujeres tienen menos probabilidades de recibir estos medicamentos que los hombres. Esta es otra razón por la que las mujeres pueden tener pequeños accidentes cerebrovasculares silenciosos que pasan desapercibidos y dañan el tejido cerebral provocando deterioro cognitivo", ha comentado Wood.
La fibrilación auricular es el trastorno del ritmo cardiaco más frecuente y afecta a más de 40 millones de personas en todo el mundo. Las personas con esta afección tienen un riesgo cinco veces mayor de sufrir un ictus en comparación con sus compañeros sanos. Las mujeres tienen más síntomas de fibrilación auricular que los hombres y peores resultados de la enfermedad, con un mayor riesgo de muerte y accidentes cerebrovasculares más incapacitantes.
La demencia es más frecuente en las mujeres que en los hombres. La fibrilación auricular se asocia a un mayor riesgo de deterioro cognitivo y demencia, posiblemente porque la enfermedad está relacionada con un riesgo más de dos veces superior de ictus silenciosos.
La acumulación de ictus silenciosos y las lesiones cerebrales asociadas a lo largo del tiempo pueden contribuir al deterioro cognitivo. La prevención de los accidentes cerebrovasculares con anticoagulantes orales es la principal prioridad en el tratamiento de la fibrilación auricular y puede reducir el riesgo de demencia.
Este fue el primer estudio longitudinal que utilizó datos multicéntricos para examinar las diferencias de sexo en la prevalencia de la enfermedad cognitiva en pacientes con fibrilación auricular y la trayectoria hacia la demencia. El estudio incluyó a 43.630 participantes de la cohorte del National Alzheimer's Coordinating Center, que ha reclutado a adultos de la población general estadounidense desde 1984.
De ellos, 4.593 (11%) tenían fibrilación auricular al inicio del estudio y 39.037 (89%) no. La edad media era de 78,5 años y el 46% eran mujeres. Para ser incluidos en este estudio, los participantes debían acudir al menos a tres visitas clínicas anuales durante las cuales se les realizaban pruebas neuropsicológicas y se les clasificaba en cognición normal, deterioro cognitivo leve (DCL) o demencia.
Los investigadores analizaron las asociaciones entre la fibrilación auricular y el diagnóstico cognitivo basal; y la fibrilación auricular y el tiempo transcurrido hasta la progresión del diagnóstico cognitivo.
Los análisis se ajustaron en función de factores que podían influir en las relaciones, como la edad, el sexo, la raza, la educación, el índice de masa corporal, el tabaquismo, la depresión, la hipertensión, la diabetes, el colesterol alto, la insuficiencia cardiaca, el ictus y la apnea del sueño. Se comparó a hombres y mujeres con fibrilación auricular con los que no la padecían y se examinaron las diferencias por sexos.
Las mujeres con fibrilación auricular tenían tres veces más probabilidades de sufrir DCL y demencia al inicio del estudio que las mujeres sin fibrilación auricular, con odds ratios de 3,43 (DCL) y 3,00 (demencia). Las odds ratio para los hombres fueron de 1,73 y 1,60, respectivamente, pero ninguna de las dos asociaciones fue estadísticamente significativa en los hombres.
Durante una mediana de seguimiento de cuatro años, el 30 por ciento de los participantes pasó a un estadio peor de deterioro cognitivo y el 21 por ciento desarrolló demencia. Las mujeres con fibrilación auricular presentaban un mayor riesgo de progresar a un estadio peor de deterioro cognitivo en comparación con las mujeres sin fibrilación auricular.
En cuanto a la progresión a cada estadio, en comparación con las mujeres sin fibrilación auricular, las mujeres con esta afección tenían más probabilidades de pasar de una cognición normal a un DCL y de un DCL a una demencia vascular. Las asociaciones entre la fibrilación auricular y un deterioro más rápido de la cognición no fueron estadísticamente significativas en los hombres.
"Los análisis indican asociaciones más fuertes entre la fibrilación auricular y el deterioro de la función cognitiva en las mujeres en comparación con los hombres. Establecer formas de identificar a los pacientes con fibrilación auricular con mayor riesgo de deterioro cognitivo e ictus servirá de base para futuras intervenciones destinadas a prevenir o ralentizar la progresión hacia el deterioro cognitivo y la demencia", ha concluido Wood.