MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
El secretario general de Naciones Unidas (ONU), António Guterres, ha avisado de que el mundo está actualmente "en guerra con un virus", el nuevo coronavirus, por lo que ha llamado a la "solidaridad" de los países porque la "humanidad está angustiada y el tejido social se está desgarrando".
Durante una rueda de prensa virtual en la sede de la ONU en Nueva York (Estados Unidos), Guterres ha recordado que la situación que ha provocado el nuevo coronavirus, cuya enfermedad se denomina Covid-19, "no tiene precedentes", por lo que ha señalado que la "creatividad" de las repuestas que se den deben estar a la "altura" de la naturaleza excepcional de esta crisis.
A su juicio, las medidas nacionales no abordan la complejidad global de la pandemia, la cual afectará especialmente a los países más pobres y a las mujeres, por lo que ha reiterado la necesidad de llevar a cabo políticas "coordinadas, decisivas e innovadoras" por parte de los países con mayores economías del mundo.
"Estamos en una situación sin precedentes y las reglas que conocíamos ya no se aplican, por lo que no podemos recurrir a las herramientas habituales en tiempos tan inusuales. La creatividad de la respuesta debe estar a la altura de la naturaleza única de esta crisis, y la magnitud de la respuesta debe estar a la altura de su magnitud", ha recalcado el secretario general de la ONU.
Dicho esto, Guterres ha señalado que, de hacerse de un modo correcto, la gestión de la crisis del coronavirus puede representar una oportunidad "única" para avanzar en un mundo "más sostenible e inclusivo". Además, ha señalado que ya se ha demostrado que el nuevo coronavirus se puede contener, por lo que ha pedido a los líderes mundiales que se reúnan para abordar la pandemia, estudiar el enfoque social y las medidas de recuperación económica.
Del mismo modo, Guterres ha solicitado que se produzca un aumento "inmediato" del gasto sanitario para atender las necesidades más urgentes y que se realice un mayor número de pruebas diagnósticas, se mejoren las instalaciones sanitarias, se apoye al personal sanitario y se garanticen los derechos humanos.
"Se ha demostrado que el virus se puede contener. Ha de contenerse. Si dejamos se extienda como un incendio forestal, especialmente en las regiones más vulnerables del mundo, matará a millones de personas. Este escenario demanda pasar de una situación en que cada país implementa sus propias estrategias por separado, a una que garantice una respuesta mundial coordinada que ha de incluir ayuda a los países menos preparados para afrontar la crisis La solidaridad mundial no es sólo un imperativo moral, sino que redunda en beneficio de todos", ha dicho.
"EL CORONAVIRUS NO ES UNA CRISIS BANCARIA"
Por otra parte, el secretario general de la ONU ha argumentado que, diferencia de la crisis económica del año 2008 cuando se inyectó grandes sumas de capital al sector financiero, el coronavirus "no es una crisis bancaria", por lo que la liquidez del sistema financiero "debe estar garantizada", y los bancos deben utilizar su capacidad para apoyar a sus clientes".
"No olvidemos que esta situación es esencialmente una crisis humana. Lo más importante es que debemos centrarnos en las personas, los más vulnerables, los trabajadores con bajos salarios, las pequeñas y medianas empresas. Eso significa apoyo salarial, seguros, protección social, prevención de quiebras y pérdida de empleos", ha destacado.
Al mismo tiempo, ha subrayado que es el momento de "desmantelar las barreras comerciales y restablecer las cadenas de suministro", insistiendo en que los países con sistemas de protección social más estables fueron los que menos sufrieron la crisis del 2008 y los que se recuperaron "más rápidamente" de sus efectos.
Finalmente, ha asegurado que la ONU va a apoyar a todos los gobiernos para garantizar que la economía mundial y las personas a las que servimos salgan más reforzadas de la crisis. "Más que nunca, necesitamos solidaridad, esperanza y voluntad política para superar esta crisis de manera conjunta", ha zanjado.