Covid-19 rebrote: Salud Pública marca la "señal de alarma" para más medidas

La nueva palabra de moda es 'rebrote'. Y no es para menos, el temor de que un rebrote de casos de coronavirus Covid-19 empuje a la población a un nuevo confinamiento es palpable. Ya se han producido casos tanto en España, como fuera. Tres comarcas de Huesca han vuelto a fase 2 y Alemania ha confinado a una población de 360.000 habitantes. ¿Qué cifras de contagio debería hacer saltar todas las alertas? Rafael Ortí, presidente de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (Sempsph), explica a Redacción Médica que no importa tanto el número de contagios, sino conocer su origen. "Tener un 10 por ciento de casos Covid-19 de origen desconocido en una zona sería un signo de alerta", afirma. 

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Ortí explica que son muchos factores los que hay que tener en cuenta. Por ejemplo, el tamaño del lugar en que se produce el rebrote. "No es lo mismo que el 10 por ciento de un pueblo esté contagiado, a que lo esté el 10 por ciento de una ciudad como Madrid o Barcelona. En las grandes ciudades un porcentaje de casos de origen desconocido inferior a 10 ya sería peligroso". Para Ortí, la situación está descontrolado cuando "se detecta el número mínimo posible que sugiriera fallo de capacitación de los servicios de Salud Pública para hacer seguimiento de contactos". 

Precisamente, fue ese descontrol en la transmisión del virus lo que nos llevó a confinarnos a todo el país: "Al principio de la pandemia se desconocía el origen de un 5 por ciento de casos pero se llegó a desconocer el 90 por ciento de focos en el peor momento de la pandemia".

La cifra del 10 por ciento de Ortí contrasta con la presentada por Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (Ccaes), en la rueda de prensa del pasado jueves, cuando señaló que España "detecta el origen de entre el 60 y el 65 por ciento de de los nuevos casos de coronavirus en el país". No obstante, Simón se refería a España en general y Ortí a lo que sería un escenario preocupante en una zona concreta.

¿Un verano tranquilo o confinados?

Ortí atribuye el descontrol de la transmisión que se produjo en España en su día a la escasez de medios de los sistemas de vigilancia, algo que parece que ha sido mejorado ahora. "En estos momentos los sistemas de vigilancia epidemiológica están más reforzados. Salud Pública y Atención Primaria cuentan con más medios". 

Aunque para el presidente de la Sempsph siguen haciendo falta más medios, se muestra optimista respecto al control de la pandemia en verano. "La tendencia de rebrotes es la esperada. La buena noticia es que en España estamos detectando brotes más pequeños que en Alemania y China. Los sistemas de información se han puesto las pilas. Se detectan en mataderos, municipios, etc.".

El especialista explica que los rebrotes pueden ser de dos tipos: "Casos aislados, es decir, los que llegan importados, y los que se generan en espacios donde hay grandes aglomeraciones de gente irresponsable". Ortí también aclara que muchos de los casos que se detectan ahora son antiguos contagios cuya PCR sigue siendo positiva o test de anticuerpos que muestran que la persona puede haber estado contagiada hace dos meses. 

¿Y en septiembre?

"En verano se controlan las distancias, la inercia de la mascarilla sigue, el efecto de los rayos ultravioleta,… no creo que haya peligro. En septiembre será otro cantar", considera. El "frío, el regreso a los colegios y el hecho de que la gente vuelva a agruparse nos lleva a extremar las alertas en este período". 

Medidas a tomar en caso de rebrote

De producirse un rebrote, Ortí tiene claro que "no tiene sentido volver a confinar a todo el mundo. "No importa tanto el número de contagios como de descontrol de los mismos. Puede haber un rebrote de 700 contagios en una empresa, por ejemplo, y se confinaría a la gente de la empresa. Si es un pueblo pues igual". Estos confinamientos deberían llevar aparejados "un estado de alarma que impidiera la movilidad en la zona".