Aurora Araujo, Carolina de Miguel Benadiba y Paloma Navas.
La
prescripción del ejercicio físico es una decisión "maravillosa" que aplauden los
fisioterapeutas, pero que debe ir ligada a estos profesionales y
no debe ser una decisión única de Medicina de Familia. A esta postura de la Fisioterapia le acompaña la de
Medicina Física y Rehabilitadora, quienes consideran que esta derivación al ejercicio físico
debe ir acompañada por su especialidad, e incluso que ellos mismos, los rehabilitadores, son los únicos que deben seguir este proceso en los casos de pacientes con discapacidad.
Ambas posturas llegan tras conocer, por parte de la Consejería de Sanidad de Madrid, que desde este mes
los médicos de Familia podrán recetar ejercicio físico con el fin de fomentar la adquisión de hábitos de vida saludable. Los fisioterapeutas consideran que, aunque es una buena idea que ayudará a reducir el sedentarismo entre los pacientes, "se ha seguido una vía menos óptima para que el ejercicio en esa población con patología tenga el resultado que pretenden, que sea un sustitutivo de fármacos", señala
Aurora Araujo, decana del Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid. Además, remarca que tras un estudio llevado a cabo de Madrid, si se derivasen estos pacientes a tiempo a un fisioterapeuta
"se ahorrarían 540 millones de euros a los contribuyentes", además del ahorro en fármacos.
Para ella es "simple" hacer de este nuevo modelo algo óptimo: "Si un médico de Familia, como es el caso de este programa, considera que un paciente necesita un tratamiento sanitario, lo deriva a otro sanitario o a un especialista como un traumatólogo. No entendemos entonces
por qué el ejercicio físico no se deriva a un fisioterapeuta, que es quien lo tiene que llevar a cabo", explica.
Araujo insiste en que, al hablar de salud, hay muchos agentes implicados: "Gente que educa en salud, los profesores de Educación Física del colegio e instituto, los maestros... Pero cuando hablamos de Sanidad, tenemos equipos sanitarios como médicos, enfermeras, terapeutas ocupacionales y en concreto a los profesionales que nos dedicamos al ejercicio en patologías, los fisioterapeutas", asegura. Para ella; , prescribir ejercicio "para enviar a la gente a un polideportivo
sin el control de un profesional sanitario" es, a su entender,
un riesgo para la salud de la población.
"Si un paciente necesita un tratamiento y se deriva a un especialista, no entendemos por qué para prescribir ejercicio físico no se deriva a un fisioterapeuta"
|
Medicina Física sin Familia para pacientes con discapacidad
Los
especialistas en Medicina Física y Rehabilitación son los encargados de la planificación y prescripción del ejercicio físico en los distintos niveles de discapacidad. Como señala
Carolina de Miguel Benadiba, presidenta de la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física (SERMEF) esta especialidad se centra en la
prevención de la discapacidad y el ejercicio físico estructurado, "que es una de las terapias con más evidencia científica para mejorar la salud, la calidad de vida y la funcionalidad".
En el caso de estos médicos especialistas, apoyan una trabajo conjunto con Familia
excepto en los casos de pacientes con discapacidad, para los que requieren un trabajo exclusivo de Rehabilitación. Para ella,
el ejercicio es "tan eficaz como un fármaco", pero al que debe prestarse "más atención" a la dosificación y a las derivaciones individuales entre pacientes con discapacidad.
"Queremos reseñar que la prescripción de ejercicio físico terapéutico en paciente con discapacidad
ha de llevarla a cabo un médico rehabilitador, mientras que la atención al paciente sano (con el objetivo de fomentar hábitos de vida saludable como se quiere implantar en Madrid en la prevención) puede hacerse desde Atención Primaria, pero
siempre es necesaria esa interconexión entre especialistas de Primaria y la especialidad para valorar cada caso", comenta.
Para De Miguel, la prescripción de ejercicio físico en Atención Primaria en paciente sano está bien enfocada "siempre y cuando se enmarque en
un programa bien organizado y estructurado" en el que haya una comunicación entre especialistas para determinar si un paciente necesita un tipo de ejercicio u otro, en función de su estado de salud.
"La rehabilitación está orientada a
combatir la limitación funcional que conlleva a la discapacidad. Los objetivos finales de la rehabilitación son mejorar la calidad de vida de los pacientes y sus familias, facilitar la mayor participación en la vida social y ayudar a las personas con discapacidad para alcanzar una vida satisfactoria y con la máxima independencia", concluye.
"El ejercicio físico en pacientes con discapacidad ha de llevarse a cabo por un médico rehabilitador"
|
Salud Pública considera "efectiva" la prescripción deportiva
Se trata de una medida que valoran de manera positiva en la
Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública y Gestión Sanitaria (Sempspgs), aunque enfatizan en la importancia de ir más allá, haciendo las ciudades más "caminables".
Prescribir hacer deporte supone para la salud pública
"una de las medidas más efectivas" para conseguir mejorar la esperanza y la calidad de vida, tal y como comenta
Paloma Navas, médica preventivista del Hospital de El Escorial (Madrid) y vocal de la Sempspgs. En una conversación con este diario, Navas subraya la necesidad de que el Sistema Nacional de Salud (SNS)
se centre "en la salud y no en la enfermedad". "La promoción de la salud no tiene que hacerse desde la Atención Primaria, sino desde todos los niveles sanitarios. No tiene ningún sentido
que se gaste mucho más dinero en fármacos que en promocionar la salud", afirma.
Para ello, la facultativa
pone el foco en lograr una "adecuada" educación de la salud y prevención de la enfermedad, ya que la ‘llave’ para hacer frente a este gasto está en "invertir más en prevenir que en tratar". "Actualmente
solo se invierte el uno por ciento del presupuesto sanitario en la prevención, y eso es dispararnos a los dos pies", incide Navas.
Prescribir deporte se traduce en ahorro en el SNS
Desde la Sempspgs se muestran convencidos de que esta prescripción de la actividad física
tendrá beneficios futuros en el SNS, puesto que, con el ejercicio físico, se "disipan" las enfermedades que pueda desarrollar el potencial paciente.
Pero los beneficios futuros que obtendrá el país
no se circunscriben únicamente al sistema sanitario, sino que van más allá del propio SNS. Según comenta la preventivista, hay estimaciones que fijan en la disminución del absentismo, en el aumento de los años laborales productivos y en el incremento del Producto Interior Bruto (PIB) como otros "logros". Por otro lado, habría, también, "menos hospitalizaciones, menos pérdida económica por muertes prematuras y enfermedades, menos gasto sanitario por la atención directa a esas personas", detalla Navas.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.