El reto de la digitalización de la AP: "Hay que familiarizar al médico"

La Organización Mundial de la Salud (OMS) detecta retos para la transformación digital de la Atención Primaria, destinada a reducir las cargas burocráticas y “optimizar” los servicios con el foco puesto en el paciente. La capacitación y ‘familiarización’ de los propios médicos y enfermeros es uno de ellos, según se recoge en un ‘manual’ en el que evalúa las bondades y oportunidades de este tipo de herramientas.

En este manual sobre la transformación digital de la Atención Primaria (Digital Transformation Handbook for Prumary Health Care), la OMS aboga por avanzar hacia un modelo que no solo simplifique los procesos de registro y seguimiento de los datos de los pacientes a través de tecnologías, sino que “apoye” a los profesionales de sanidad en la “toma de decisiones”.

“Los sistemas basados en papel suponen una gran carga administrativa al sistema de salud y a los trabajadores, como la introducción duplicada de datos para su reutilización fuera del contexto clínico inmediato o la tabulación manual de datos para la presentación de informes -sostiene el estudio-. Esta carga administrativa quita un tiempo valioso para la prestación de servicios en un contexto, además, de escasez de personal sanitario”.

En este escenario, el organismo que abandera Tedros Adhanom defiende una mejor “capacitación digital” del personal de salud, de forma que reciba formación, por ejemplo, con “guías interactivas de familiarización” hacia nuevas tecnologías.

El objetivo no es otro que instaurar en el día a día de la asistencia médica las herramientas digitales, con las que se podría facilitar la creación de registros electrónicos de salud “interoperables” entre instituciones sanitarias para “actualizar y acceder de manera segura a la información de los usuarios”. Además, la OMS considera que, por un lado, este nuevo escenario digital permitiría a los facultativos disponer de más apoyo para la toma de decisiones en tiempo real, con recomendaciones de diagnóstico y tratamiento personalizado; y por otro, rebajar su carga burocrática con la automatización de tareas. El fin último, resume es “reducir los esfuerzos manuales para lograr una mayor eficiencia”.

“Se pueden automatizar ciertas actividades, eliminar redundancias y mejorar el flujo de trabajo general, aumentando la eficiencia o mejorando la efectividad y la calidad general de la atención”, continúa.

Envíos automáticos de recordatorios a pacientes

La sofisticación de las herramientas tecnológicas redunda también directamente sobre los pacientes, por ejemplo, con envíos de recordatorios automáticos sobre citas, vacunas o seguimientos. Esta solución, a través de mensajes de texto u otros canales, está dirigida a reducir las ausencias y mejorar la adherencia a los tratamientos, aumentando así la eficacia de las intervenciones de salud.

Finalmente, la OMS destaca la importancia de crear sistemas de derivación y coordinación que permitan a distintos proveedores de salud compartir “información relevante sobre los pacientes”, asegurando así que todos los profesionales estén al tanto de los tratamientos y necesidades de cada paciente. “Esta conexión digital facilita la colaboración y garantiza una atención integrada y sin interrupciones”, concluye.