Salvador Illa, ministro de Sanidad, y Carlos Rus, presidente de ASPE.
El
Ministerio de Sanidad ha mostrado su disposición a la sanidad privada para tomar medidas que permitan asegurar la
viabilidad económica del sector en la epidemia de coronavirus. Según ha podido saber
Redacción Médica por fuentes cercanas, el departamento que lidera
Salvador Illa ha transmitido esta posición a la
Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE) a través de una carta.
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En dicho documento, el Ministerio de Sanidad expresa ser totalmente consciente "de la situación de la sanidad privada,
del difícil papel que está desempeñando, de su esfuerzo, sentido de la responsabilidad y disposición a colaborar".
También entienden la "
complicada situación en la que se encuentran los centros sanitarios privados en materia económica y coinciden en la necesidad de tomar medidas" que contribuyan a paliar sus problemas económicos actuales. Sanidad ha trasmitido a la patronal que son conscientes de las consecuencias que está teniendo esta situación excepcional en las empresas y están
"dispuestos a tomar medidas para el sector de la sanidad privada".
Se trata del primer paso para que el ministerio y la sanidad privada comiencen a negociar un
paquete de medidas que permita mantener la salud económica del sector. ASPE ha confirmado a este periódico que en los próximos días van a elaborar aun en más profundidad el documento de propuestas que habían establecido con la ayuda del Ministerio de Industria.
El Ministerio de Industria avala las peticiones de la sanidad privada
Como ya adelantó este diario, el
Ministerio de Industria avala las peticiones de la sanidad privada para "salvar" al sector durante la pandemia de coronavirus. Según confirma ASPE, la patronal ha dialogado sobre su propuesta con la
Secretaría General de Industria, que
no ha rechazado ninguna de las medidas. "Solo nos han pedido más detalle sobre alguna de las afirmaciones, y en algunos casos nos solicitó aclaraciones", explican en ASPE.
Una vez finalizado este proceso, el Ministerio de Industria señaló a la patronal de la sanidad privada que remitiese la propuesta al
Ministerio de Sanidad y al Ministerio de Hacienda. Será el ministerio que lidera Salvador Illa quien tenga la última palabra sobre las peticiones de la sanidad privada.
Estas medidas se resumen en un
decálogo de medidas que permitan evitar la quiebra económica de un sector que está sufriendo graves estragos en esta pandemia. Y es que, mientras los
ingresos de la sanidad privada se han reducido prácticamente a cero, tras la
orden del Gobierno de desprogramar toda actividad sanitaria no urgente-preferente (ASPE calcula que la actividad se ha reducido un 80 por ciento aproximadamente), los
costes fijos no solo se mantienen, sino que han aumentado.
Algunos de los grupos hospitalarios privados más grandes de España han comunicado a este periódico que la quiebra de varias compañías puede producirse en seis semanas. "Sería más que injusto que los
profesionales sanitarios que se están dejando la piel contra el coronavirus en hospitales privados no pudieran recibir su sueldo", apuntan estas fuentes. Hay que recordar que la sanidad privada da asistencia al 19 por ciento de los hospitalizados por coronavirus y al 10 por ciento de los casos en UCI.
Exención de impuestos y líneas de crédito para la sanidad privada
Entre las medidas económicas que propone ASPE se encuentra la
exención de impuestos: exención de cuotas de las
Seguridad Social durante el tiempo en que se prolongue el estado de alarma, exención del pago de impuestos y retenciones del
IRPF de los trabajadores durante ese mismo periodo, aplazamientos y/o bonificaciones en Seguridad Social, aplazamientos y/o bonificaciones en
Impuesto de Sociedades e IBI y créditos fiscales por aumento de plantilla sanitaria.
Por otra parte, las propuestas se centran en la
obtención de líneas de financiación y liquidez: acceso a líneas de financiación gratuita o con carencia en la devolución de principal para poder acceder a la liquidez suficiente que permita hacer frente al gasto corriente, con el fin de asegurar que llega el crédito al sector, acceso a una línea de financiación específica para el sector, por
importe del 75 por ciento de la facturación del sector hospitalario durante 2 meses y la aprobación de fórmulas de cobro excepcionales.
Además, ASPE recupera una de las peticiones históricas del sector, la
reducción del IVA sanitario a tipo superreducido para facilitar la adquisición de compras de materiales y equipos para la atención sanitaria.
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