Luis Mendicuti, secretario general de ASPE.
La
Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE) ha enviado varias cartas dirigidas a los titulares de las carteras de Sanidad y de Universidades para expresarles la "necesaria consideración" de desarrollar, de cara a los refugiados ucranianos, el
Convenio sobre Reconocimiento de Lisboa y así adoptar "medidas que permitan evaluar con equidad y prontitud si los refugiados ucranianos reúnen los requisitos de
acceso a una profesión sanitaria".
Este convenio para Reconocimiento de Cualificaciones Relativas a la Educación Superior en la Región Europea
se encuentra en vigor para España desde el 1 de diciembre del 2009. El propósito de ASPE, según explican, es solucionar la situación que afecta a los
refugiados de Ucrania en España que, siendo profesionales sanitarios, no pueden ejercer su profesión aquí. Para ello, se propone el desarrollo de un mecanismo, el
Pasaporte Europeo de Cualificaciones Profesionales, suscrito mediante Convenio Internacional por España hace 13 años.
Este mecanismo se aplica ya en otro país de la Unión Europea desde el pasado 21 de marzo. Italia aprobó un Decreto Ley de medidas urgentes para contrarrestar los efectos económicos y humanitarios de la crisis de Ucrania, activando de esta forma el Pasaporte Europeo de Cualificaciones para Refugiados, por el cual, mediante un
sistema de evaluación y entrevistas, los refugiados van a poder ejercer las profesiones sanitarias hasta
marzo de 2023.
Mendicuti: "Se dan las condiciones precisas para habilitar a este colectivo para ejercer la profesión sanitaria en España"
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Concretamente, desde ASPE señalan que el Convenio de Reconocimiento de Lisboa (sección VII, artículo VII”) establece que se adoptarán "los procedimientos que permitan evaluar con equidad y prontitud si los refugiados, las
personas desplazadas y las personas asimiladas a los refugiados reúnen los requisitos pertinentes de acceso a la educación superior, o a programas complementarios de educación superior, o a actividades laborales, aun cuando
no se puedan presentar pruebas documentales de las cualificaciones obtenidas".
"Se dan las condiciones precisas para
actuar con diligencia de cara a habilitar este colectivo concreto de refugiados para ejercer la profesión sanitaria en España, previo procedimiento de evaluación", ha afirmado Luis Mendicuti, secretario general de ASPE.
Atajar el déficit de profesionales sanitarios
Este mecanismo permitiría reducir al mismo tiempo el
profundo déficit de profesionales en el sistema sanitario español, del que la sanidad privada adolece de forma significativa. ASPE viene alertando en distintas ocasiones y foros de esta grave escasez, que
condiciona el buen desarrollo del Sistema Nacional de Salud.
La sanidad privada, a pesar de que durante la pandemia ha afrontado dificultades extremas para la contratación de profesionales sanitarios y, que aún así, el numero de estos trabajadores ha aumentado un 6,6 por ciento, sigue precisando de la
incorporación de nuevos profesionales, especialmente de personal de enfermería (el 95% de los hospitales establece que tiene una necesidad media-alta) y de médicos (el 58 por ciento fija su necesidad en media-alta).
Luis Mendicuti señala que "la
búsqueda activa de profesionales requiere impulsar todos los mecanismos disponibles para hacer frente a esta grave escasez, y la
homologación de títulos de profesionales sanitarios extracomunitarios es imprescindible en estas circunstancias”.
Con carácter general, se estima que existe una lista de espera de alrededor de
3000 médicos extracomunitarios pendientes de la homologación de su título, debido a la amplia demora de los procesos burocráticos. ASPE sigue solicitando a la Administración una agilización de estos trámites para favorecer la
incorporación de los profesionales al sistema sanitario español.
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