Los médicos y enfermeros con covid podrán ejercer en "áreas no vulnerables"

Los sanitarios que hayan dado positivo en coronavirus podrán ser reubicados en áreas “no vulnerables” del hospital o bien realizar teletrabajo, según ha plasmado el Ministerio de Sanidad en la estrategia de vigilancia y control del Covid-19. Si ninguna de estas opciones fuese posible, los profesionales contagiados “no acudirán a su centro durante los primeros cinco días desde el inicio de los síntomas”.  

La posibilidad de “reubicación” dentro del mismo centro sanitario constituye una de las principales novedades de la actualización de la Estrategia de Vigilancia y Control frente al Covid-19 tras la fase aguda de la pandemia. A este derecho podrán acogerse “las personas que trabajan en áreas asistenciales de centros sanitarios, sociosanitarios, penitenciarios y otros con personas institucionalizadas”, así como los trabajadores “que prestan apoyo y cuidados a personas vulnerables”.

De esta forma, en caso de contagio estos podrán ser trasladados a “áreas del centro de trabajo calificadas como no vulnerables o realizarán teletrabajo”, aunque si ninguna de estas fórmulas es viable, Sanidad mantiene la abierta posibilidad de que los afectados no acudan a su puesto durante los cinco días siguientes a la aparición de síntomas o desde la fecha del diagnóstico.

“Pasado este tiempo, y siempre que hayan transcurrido 24 horas tras la desaparición de los síntomas, se realizará una prueba de antígenos, si el resultado es negativo podrá volver a incorporarse a su lugar de trabajo”, reza el documento. En cualquier caso, a partir del séptimo día desde el inicio de síntomas o desde el diagnóstico positivo, “y siempre que el profesional esté asintomático o con síntomas residuales”, este se podrá incorporar a su puesto de trabajo “empleando las medidas preventivas necesarias según la valoración del servicio de riesgos laborales”.

¿Qué hacer si se tienen síntomas leves de Covid-19?

Por otro lado, Sanidad ha modificado algunas de las actuaciones a seguir en caso de que surjan síntomas compatibles con el virus. Hasta ahora, la estrategia recogía la recomendación de que aquellas personas que presenten indicios “leves” permanecieran en su domicilio “hasta que obtengan el resultado” de la prueba.

En la última actualización, esta recomendación desaparece, de forma que a los casos sospechosos únicamente se les recomienda “extremar las precauciones”, reducir todo lo posible las interacciones sociales, utilizar “de forma constante la mascarilla” y mantener una adecuada higiene de manos hasta recibir el diagnóstico.

En caso de presentar criterios de gravedad o mala evolución (disnea, más de 38 grados de fiebre durante tres días…), el paciente deberá contactar con su médico o con el sistema sanitario "observando en todo caso todas las medidas personales de control de la transmisión y utilizando, si es posible, un medio de transporte privado en el supuesto de desplazamiento".