Un "búnker" con seguridad nuclear para la protonterapia en Cantabria

Instalar un sistema de protonterapia, aparte de una importante inversión económica, implica una transformación estructural de calado en el hospital que vaya a acoger los nuevos equipos de terapia de protones para multiplicar las herramientas de tratamiento de cáncer. En el caso del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, en Santander, el proyecto consiste en la construcción de un búnker que, sumado al coste del propio sistema, supone una inversión de más de 42 millones de euros. El Consejo de Seguridad Nuclear supervisará los protocolos de seguridad de unos equipos para cuyo manejo están recibiendo formación específica los profesionales sanitarios del hospital.

El objetivo del proyecto de instalación de la protonterapia en Marqués de Valdecilla es claro: ampliar su capacidad para tratar el cáncer. Según traslada a Redacción Médica el director gerente del hospital, Félix Rubial Bernárdez, el centro cuenta actualmente con “todas las técnicas terapéuticas de Radioterapia que pueden ofrecerse a día de hoy al paciente oncológico”. O casi. La única que le falta es la protonterapia, cuya incorporación permitirá no sólo ofrecer a los pacientes esa opción terapéutica, sino también contar “la posibilidad de combinación de varias técnicas”.

Ello implicará importantes cambios estructurales en el centro. “Se va a construir un edificio bajo tierra que albergará el búnker donde se instalará el sistema de terapia de protones. El resto de instalaciones clínicas -consultas, salas de anestesia, salas de planificación, etcétera- estarán ubicadas en la planta -4 de las torres, espacio que sólo habría que acondicionar, ya que actualmente está vacío”, indican desde el hospital.

Además de ello, la instalación de los equipos de protonterapia implicará contar con nuevos sistemas de refrigeración, “tanto para el buen funcionamiento del propio sistema de terapia de protones, como para los nuevos espacios habilitados para el tratamiento y seguimiento del paciente oncológico”. La inversión total para el ejecutar el proyecto asciende a 42,3 millones de euros, repartidos entre los cerca de 22,8 millones que cuesta el sistema de terapia de protones en sí y los 19,5 millones de la obra.

En lo concerniente a sistemas de seguridad, se basará en aspectos específicos de este y otros tipos de instalaciones radiactivas. Entre otras cosas, el Consejo de Seguridad Nuclear ha de supervisar el sistema y darle el visto bueno antes de que se ponga en marcha. Será, según lo previsto dentro de dos años y dos meses: se estima que la construcción del búnker se prolongue durante 14 meses, a los que hay que sumar otros 12 meses para la instalación y puesta en funcionamiento del sistema de terapia de protones y el acondicionamiento de los espacios asistenciales de la planta -4.

Sin embargo, parte del cumplimiento de esos tiempos está supeditada al buen funcionamiento del hospital. “Se busca la menor injerencia en las operaciones habituales, lo que posiblemente requiera mayor ralentización en algunas fases de la ejecución de la obra, y obligará a organización de los tiempos tanto por el hospital como por las partes adjudicatarias”.

Para que el proyecto llegue a buen puerto, será necesario un trabajo de coordinación a tres bandas: “Se está trabajando tanto con la constructora, como con el fabricante y los diferentes servicios de instalaciones del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla”. Del mantenimiento del sistema se ocupará la empresa suministradora, pero el resto de la instalación se gestionará en base al mismo modelo organizativo con el que ya cuenta el hospital, incluyendo las áreas de Ingeniería y de personal sanitario.

Formación específica para el personal sanitario

En cualquier caso, el hospital ya cuenta con un plan de formación específico para todos sus profesionales implicados de un modo u otro en el proceso radioterápico, a saber, técnicos de Radioterapia, celadores, enfermeras, oncólogos radioterápicos, auxiliares, anestesiólogos y radiofísicos hospitalarios, entre otros.

Si bien algunos de estos profesionales ya han comenzado a formarse en planificación de tratamientos y aspectos técnicos del nuevo sistema, el plan “se irá desarrollando durante los próximos años”.

Prórroga del convenio para la protonterapia en el SNS

En febrero, el Ministerio de Sanidad, la Fundación Amancio Ortega Gaona y siete comunidades autónomas acordaron prorrogar cuatro años -hasta octubre de 2029- su convenio para instalar la protonterapia en el Sistema Nacional de Salud (SNS). País Vasco, Cataluña, Galicia, Andalucía, Comunidad Valenciana, Canarias y la Comunidad de Madrid son las regiones que forman parte del pacto.

La complejidad en la ejecución de los proyectos -desde las obras, pasando por la instalación de los equipos y hasta la formación de profesionales sanitarios-, llevó a todas las partes a concluir que el plazo inicial culminar todos los trabajos, que finalizaba el próximo 25 de octubre, se quedaba corto.