Werner Baumann, CEO global de Bayer.
Bayer ha presentado unas estimaciones para sus resultados del
cuarto cuatrimestre de 2017, cuyos resultados oficiales la compañía suele presentar en febrero. Según el
informe,
sus ventas se han reducido un 24,5 por ciento.
Así lo indica el análisis, realizado por
Vara Research basándose en
estimaciones de 12 entidades bancarias. En total, en el periodo citado, se espera que la multinacional alemana registre unas
ventas de 8.842 millones de euros, 2.877 millones menos que en
2016.
Debido a esto,
los beneficios o ganancias (antes de impuestos) procedentes de los ingresos por ventas también caen. El Ebitda y el EBIT se reducen hasta los 1.794 millones y hasta los 1.193 millones, respectivamente, casi un 14 por ciento menos en el primer caso.
Influencia sobre resultados
A pesar de que estas estimaciones no tienen por qué tener influencia directa sobre los resultados (en 2016, fueron muy superiores a lo que ingresó directamente la compañía
), un descenso tan radical como el que se observa entre las del citado año y las de 2017 apuntan a un descenso definitivo en las ventas de Bayer.
En cualquier caso, esta tendencia ya se viene viendo en los
resultados de la farmacéutica alemana de los últimos meses.
La compañía había cerrado el tercer trimestre de 2017 con cifras negativas y unas ventas netas que habían caído un 2,8 por ciento (hasta los 8.258 millones de euros) y el beneficio bruto un 1,4 por ciento (hasta los 5.542 millones).
La evolución de beneficio antes de intereses e impuestos (EBIT) mostró esta tendencia, disminuyendo hasta los 1.388 millones (nueve millones menos que el año anterior).
Essure
Con todo, la compañía salvó la situación gracias a las plusvalías de 2.800 millones relacionadas con la desconsolidación y venta de
Covestro. Sin embargo, no hay que olvidar otras cuestión que acabará afectando a los resultados de la compañía de 2017: el
cese de la comercialización del polémico anticonceptivo
Essure (excepto en Estados Unidos).
En el caso de España, este producto lleva retirado del mercado desde el pasado mes de agosto por orden de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), dependiente del Ministerio de Sanidad, al no disponer de un certificado de marcado CE en vigor.
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