Belén Crespo, directora de la Aemps.
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Redacción. Madrid
La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) ha publicado un nuevo informe de posicionamiento terapéutico (IPT), esta vez sobre ofatumumab (Arzerra, de GSK), para el tratamiento de la leucemia linfocítica crónica, la forma más común de leucemia en los países de Europa occidental.
Según el documento, ofatumumab, en monoterapia, es en el momento actual “una opción terapéutica en pacientes doble refractarios al tratamiento con fludarabina y alentuzumab (siempre que no exista imposibilidad para administrar alguno de los dos) que previamente hayan recibido rituximab (si es que son candidatos a tratamiento con anti-CD20)".
Este fármaco es un anticuerpo monoclonal humano tipo I, que se une específicamente a la molécula CD20 de las células B, una unión que induce la muerte celular, principalmente por citotoxicidad dependiente del complemento y de anticuerpos.
En la elaboración de este IPT, aparte de los expertos de la Aemps, también han colaborado María Dolores García Malo, hematóloga del Hospital Morales Meseguer (Murcia) y el Centro de Información Farmacoterapéutica del Servicio Gallego de Salud.
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