Redacción. Madrid
La Fundación Salud 2000 ha editado la monografía ‘Aspectos bioéticos, jurídicos y médicos de la discapacidad’, una guía que nace con el objetivo de dar respuesta a las muchas incógnitas y dilemas generados por la transformación del concepto de discapacidad en los últimos años, según explican desde la fundación.
De izquierda a derecha: el secretario general del Consejo General de la ONCE, Rafael de Lorenzo; el director general de Políticas de Apoyo a la Discapacidad, Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ignacio Tremiño; la presidenta ejecutiva de la Fundación Salud 2000, Carmen González-Madrid, y el portavoz del PP en la Comisión para las Políticas Integrales de la Discapacidad del Congreso de los Diputados, Francisco Vañó. |
Carmen González-Madrid, presidenta ejecutiva de la Fundación Salud 2000, ha señalado que “el enfoque de la discapacidad es un concepto que ha ido evolucionando con los años, y ello ha sido posible gracias al trabajo y la dedicación de personas y colectivos que llevan años luchando por dar a las personas discapacitadas el espacio que deben tener en nuestra sociedad. Nuestro apoyo a la nueva monografía es la forma de expresar nuestro interés por las personas con discapacidad”.
Según la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, aprobada por la Asamblea de las Naciones Unidas el 13 de diciembre de 2013, las personas con discapacidad no tienen derechos diferentes a los proclamados en los tratados internacionales pero sí deben gozar de todos los derechos humanos. De ahí que no deban ser consideradas como meros sujetos pasivos que reciben atención por parte de las instituciones sanitarias, sino como personas que deben participar activamente en la toma de decisiones sobre todos los asuntos que les afectan directamente.
Por su parte, el secretario general del Consejo General de la ONCE, Rafael de Lorenzo, ha explicado que “la persona con discapacidad no es un enfermo, sólo necesita respuestas adecuadas por parte del sistema sanitario. En ese sentido, el sector salud se enfrenta a grandes retos, ya que no es tan fácil abandonar los enfoques meramente basados en la asistencia. Resumiendo la situación, diría que las personas con discapacidad y sus familias tienen aún un cierto riesgo de exclusión y, por tanto, requieren leyes y políticas activas capaces de promover su inserción y su plena equiparación social”.