Pólipos de colon

Un pólipo de colon es una tumoración (una especie de verruga) que se produce en el interior del colon. Pueden tratarse de:

• Pólipos juveniles o pólipos hiperplásicos. Son pólipos benignos que no tienen la posibilidad de transformación maligna.
• Pólipos adenomatosos. Se trata de pólipos benignos pero que pueden transformarse en un cáncer de colon por lo que se consideran lesiones premalignas.

Los pólipos de colon son muy frecuentes. Aproximadamente una de cada 3 personas de edad media o avanzada tienen pólipos adenomatosos en su colon, pero sólo uno de cada 100 se transforma en una lesión maligna (cáncer).

¿Cuáles son las causas de los pólipos de colon?

Las causas de los pólipos de colon son generalmente desconocidas, aunque existe una enfermedad hereditaria llamada poliposis colónica familiar, en la que los miembros de la familia tienen una gran cantidad de pólipos en su colon con un importante riesgo de transformación maligna (cáncer).

¿Qué síntomas producen?

Los pólipos de colon no suelen producir ningún síntoma.

En ocasiones pueden sangrar. Si el sangrado es muy importante puede verse sangre roja mezclada con las heces. En otras ocasiones el sangrado es muy pequeño y no puede verse en las heces. Cuando el sangrado es pequeño pero muy mantenido en el tiempo puede producir una anemia por pérdida de hierro.

Diagnóstico:

Los pólipos de colon se diagnostican mediante la realización de una rectosigmoidoscopia o una colonoscopia. Si son mayores de 1 cm pueden también verse mediante una colonoscopia virtual. La posibilidad de que un pólipo sea maligno es mayor cuanto mayor sea su tamaño. Siempre que se detecta un pólipo es necesario quitarlo para que el patólogo pueda estudiar si es o no maligno (cáncer). Para quitar el pólipo se realiza una polipectomía en el transcurso de una colonosospia o de una rectosigmoidoscopia. Cuando se descubre un pólipo en una zona del colon debe realizarse una colonoscopia para explorar el resto del colon dado que con frecuencia los pólipos son múltiples. Además, aunque el pólipo no fuera maligno, deben hacerse colonoscopias periódicas, dado que la posibilidad de que aparezcan nuevos pólipos es muy alta. En general, en personas a las que se quita un pólipo se recomienda una nueva colonoscopia cada 3 años.

Pronóstico:

Los pólipos adenomatosos son lesiones premalignas (precancerosas) si bien solo unos pocos se transforman en cánceres. Cuando se quita un pólipo el patólogo debe decir si hay algún rastro o no de transformación maligna dado que si la hay, puede ser necesario operar y quitar un segmento del colon. Además, en el caso de que sea benigno, se debe valorar si el pólipo adenomatoso es de tipo velloso, tubular o tubulo-velloso. Los pólipos adenomatosos de tipo velloso tienen un riesgo de transformación cancerosa 3 veces mayor que los de tipo tubular y, por tanto, se debe estar mas atento a que puedan aparecer nuevos pólipos en el futuro. Los pólipos pueden reaparecer con el tiempo, de ahí la necesidad de realizar colonoscopias periódicas de control.

¿Son hereditarios?

Existe un componente hereditario en la aparición de pólipos. Además existe una enfermedad con una clara herencia (poliposis colónica familiar) que se caracteriza por la aparición de múltiples pólipos, que reaparecen aunque se quiten y con una elevada posibilidad de transformación cancerosa.

¿Cuál es el tratamiento de los pólipos de colon?

Todo pólipo debe extirparse mediante polipectomía. Posteriormente debe valorarse la aparición de nuevos pólipos con colonoscopias periódicas. Si el pólipo que se ha extirpado tiene datos de transformación cancerosa puede ser necesario operar y quitar un trozo del colon.