Josep Maria Puig, secretario general del sindicato Metges de Catalunya
29 ago. 2016 12:50H
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La nueva dirección del sindicato Metges de Catalunya ha pedido a la Consejería de Salud de la Generalitat, que lidera Toni Comín, erradicar el 38% de precariedad laboral que sufren los médicos de los hospitales públicos y concertados con un "plan calendarizado" a cuatro años.
Josep Maria Puig, secretario general de Metges, ha propuesto "marcar periodos para impulsar una reducción paulatina de un 10% por año" con el fin de garantizar que al final de la legislatura no queden médicos que arrastren un trabajo precario desde hace más de una década.
Esta estrategia, que trasladarán al consejero en una reunión, incluye prohibir que ningún facultativo pueda estar más de dos años contratado de forma temporal, puesto que actualmente existe "una cronificación de la temporalidad", ha deplorado Puig, al calificar de cruel esta situación.
Este plan también tiene en cuenta la situación de los médicos residentes porque Metges ha detectado que, a veces, no reciben una formación correcta por la presión asistencial. "En según qué sitios es posible que falle y que el residente trabaje con poca supervisión, menos de la que necesitaría para formarse bien", ha señalado Puig.
Por esta razón, ha reclamado que la administración libere de cargas de trabajo a los médicos adjuntos para que puedan dedicar más tiempo a los médicos residentes: "La empresa, pública o concertada, debe dejar tiempo suficiente al médico y liberarlo de parte de la tarea asistencial", ha manifestado.
Convenio médico
Otra de las prioridades del MC es acordar el llamado 'Convenio médico', una herramienta que sí existe en otros países europeos y que debe permitir a los facultativos tener una "interlocución directa" con la administración y las empresas por las que trabajan para negociar sus condiciones laborales.
Este diálogo se articularía a través de una mesa de negociación para abordar las condiciones de trabajo, cuestiones como el horario laboral y la carrera profesional. "Esto no cuesta dinero, es una cuestión de voluntad política", ha reivindicado Josep Maria Puig.
1.278 médicos menos por la crisis
El secretario general de MC ha cifrado en 1.278 el número de profesionales médicos, la mayoría de ellos de atención primaria, que ha perdido el sistema sanitario catalán en el periodo de crisis, al pasar de una plantilla de 10.035 facultativos en 2010 a 8.984 en 2015.
Además, durante este periodo se ha producido un "aumento de horas de trabajo, disminución de salarios y aumento de la carga asistencial", dado que cada vez hay más enfermos debido al envejecimiento de la población que conlleva más complejidad en salud.
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