Redacción. Barcelona
La Oficina Antifraude de Cataluña (OAC) investigará de oficio al director del Servicio Catalán de la Salud (CatSalut), Josep Maria Padrosa, por su vínculo con seis empresas privadas del ámbito sanitario, han confirmado a Europa Press fuentes de la institución pública.
Josep María Padrosa. |
Padrosa, director de la institución que financia toda la actividad sanitaria de los centros públicos, mantuvo su figura como apoderado en dichas empresas, aunque dimitió como director general en enero de 2011, cuando fue nombrado para el cargo, por lo que la OAC dilucidará la legalidad de este aspecto, avanza este jueves El País.
La Consejería de Salud, que ha evitado opinar sobre la investigación de la OAC, aseguró este miércoles que todos los contratos firmados por el CatSalut se ajustan a la legalidad.
Las seis empresas donde Padrosa mantenía su cargo de apoderado -del ámbito de la fisioterapia, rehabilitación y logopedia- facturaron al CatSalut 14 millones de euros en 2012, un año en el que el presupuesto del servicio se situó en los 8.506 millones de euros.
La facturación de dichas empresas se redujo un 9,2 por ciento respecto a 2010, cuando Padrosa accedió al cargo, y en el mismo periodo el presupuesto del CatSalut cayó un 10,9 por ciento, en un contexto de recortes presupuestarios.
El doble cargo de Padrosa podría contravenir la ley de incompatibilidad de altos cargos de la Generalitat y la ley de ordenación sanitaria, que fija que ocupar un cargo en la dirección del CatSalut “es incompatible con cualquier vinculación con empresas o entidades relacionadas con cualquier tipo de prestación de servicios”.
Justificación de la empresa
En un comunicado remitido este miércoles, Corporación Fisiogestión -una de las seis empresas de las que Padrosa fue director general-confirmó que éste mantenía su cargo como apoderado, pero aseguró que estos poderes “no se han podido utilizar en ningún momento”.
“Es política corporativa que, cuando una persona deja la Corporación por el motivo que sea, sus poderes, en virtud de su cargo, quedan custodiados por la empresa, y al no ser ya utilizables, no son revocados notarialmente”, precisa el comunicado, por lo que ni la empresa ni Padrosa acudieron al registro mercantil para darse de baja como apoderado.
“Esta situación se ha reproducido en todas las personas que han dejado la organización”, añade la nota, en la que manifiesta su tranquilidad porque entiende que su actuación y la del director del CatSalut han sido totalmente correctas.