Redacción. Granada
La consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de Andalucía, María José Sánchez Rubio, ha matizado este jueves que “el malestar” existente entre los trabajadores sanitarios está vinculado “fundamentalmente” con la decisión del Gobierno central de aumentar la jornada de 35 a 37,5 horas y ha defendido el modo en que la Junta ha gestionado este asunto, evitando que 8.000 profesionales se fueran “a la calle”.
Sánchez Rubio, que ha presentado los Presupuestos de la Junta de Andalucía para 2014 en Granada, ha respondido de este modo a preguntas de los periodistas acerca de las concentraciones impulsadas en la comunidad por el recorte planteado por la Junta para los trabajadores sanitarios en las cuentas del próximo año.
Tras mostrarse consciente de que “el mejor activo” del sistema sanitario andaluz son sus profesionales, la consejera ha defendido que si la Junta hubiera aplicado la medida del Gobierno tal cual se reprodujo, unas 8.000 personas habrían sido despedidas, por lo que, en su momento, se “acordó” hacer una reducción en cuanto al número de horas y de salario a los afectados.
Así, y tras considerar “legítimo” que los profesionales reclamen recuperar el cien por cien del salario y de la jornada, ha insistido en que en Andalucía no se ha actuado como en otras comunidades, donde se ha despedido a personal y se han “cerrado servicios”.