Andalucía impulsa un nuevo plan de Estrategias en Atención a la Cronicidad

La Consejería de Salud y Familias de Andalucía ha iniciado el diseño de una nueva Estrategia de Atención a la Cronicidad. Se trata de un plan que busca mejorar la atención sanitaria y la calidad de vida de las personas con enfermedades crónicas, aplicando "una mirada humanizada de la atención".

La nueva Estrategia Andaluza de Atención a la Cronicidad contará con la coordinación de Juan Javier Márquez Cabeza, así como el apoyo de la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP), a través del Observatorio de Prácticas Innovadoras en el Manejo de las Enfermedades Crónicas Complejas (Opimec).

Tal y como han destacado desde la Consejería de Salud andaluza, esta nueva estrategia a la Atención a la Cronicidad busca dar respuesta al "envejecimiento natural de la población y el aumento de las enfermedades crónicas que se está produciendo en todos los países", el cual "exige un refuerzo de los recursos sanitarios y su reorientación para ofrecer una atención integral a pacientes con pluripatología y enfermedades crónicas complejas".

Asimismo, la Consejería ha resaltado que "la crisis sanitaria ocasionada por la pandemia ha impactado en la situación de salud en la que se encuentran las personas con enfermedades crónicas, situándose en un escenario de mayor vulnerabilidad".

La primera de las fases de estudio para impulsar el nuevo Plan consistirá en un análisis del entorno externo e interno de las actuaciones, con vistas a conocer los aspectos sobre los que se debe mejorar. Posteriormente, en una segunda fase se realizarán sesiones de trabajo con profesionales, asociaciones, ciudadanía, sociedades científicas y colegios profesionales, para orientar las líneas estratégicas que estructurarán la nueva Estrategia, que se concretarán en objetivos y acciones a realizar.

Con todos los datos, la nueva Estrategia afrontará los nuevos retos en la atención a la cronicidad, que exigen una respuesta diferente desde los servicios sanitarios y sociales, erigiéndose también como una "oportunidad" para abordar las áreas de mejora que la situación de pandemia ha puesto de manifiesto en el proceso de atención a las personas con enfermedades crónicas complejas o con pluripatología.