La médica Raquel Uranga renunció a su especialidad para preservar su salud mental.
La
vocación y la determinación de un médico son cualidades fundamentales para terminar con éxito su etapa como residente. Pero, existen otros factores durante su formación que pueden afectar negativamente en su
salud física y mental, provocando que, en casos más extremos, tomen la decisión de
renunciar a su especialidad.
Este ha sido el caso que ha vivido la médica
Raquel Uranga, quien ha publicado un mensaje en
Twitter explicando que, tras un año y medio después de iniciar la residencia y siendo “de las mejores” de su promoción, se ha visto en la necesidad de renunciar.
“He cogido diez kilos extra y estoy con un trastorno mixto de ansiedad y depresión. Amo las urgencias, pero amo más mi salud mental y mi felicidad”, ha escrito esta médica en su perfil junto a una foto del documento oficial de renuncia.
Muestras de comprensión y empatía de otros médicos
Tras contar su historia y los motivos por los que ha decidido tomar este rumbo, los comentarios de otros médicos no han tardado en llegar con frases motivadoras y mostrando
comprensión y empatía por la “difícil decisión tomada”.
“Lo mejor que has hecho es priorizar en tu salud. Además, con este mensaje estás animando a otros residentes, que pueden estar pasando por la misma situación, a que se armen de valor y puedan renunciar”, ha agradecido uno de ellos.
La situación por la que ha pasado Uranga no es un caso excepcional, otros médicos que han vivido situaciones similares han querido contar sus historias con el objetivo de transmitir a la autora del hilo la sensación de "que no está sola".
Renunciar a la especialidad durante la residencia
“Que triste es esto, pero desafortunadamente es una realidad. Yo, hace algunos años también
renuncié a mi residencia por malos tratos. Afortunadamente para mí, los he vuelto a retomar en otro lugar. Este tipo de situaciones deben de acabar”, ha enfatizado uno de ellos.
Asimismo, otro médico ha narrado que también renunció la semana pasada tras perder 16 kilos en los últimos meses de residencia. “A mí me diagnosticaron un trastorno depresivo grave y me hospitalizaron. La salud nunca vuelve y tiene que ser lo primero. Aplaudo la valentía de tu decisión”, ha explicado.
La mayoría de los comentarios que han participado en el hilo coinciden en la misma conclusión: hay que priorizar la salud mental. En este sentido, una médica ha lamentado lo “poco que se habla” de este tipo de problemas que tienen los médicos durante su etapa formativa en los hospitales.
La residencia "desgasta" la salud mental de los médicos
“Porque nadie habla de que lo verdaderamente difícil es hacer la residencia y aguantar todos esos años que desgastan tu salud mental”, ha lamentado.
De hecho, otro de los médicos se ha asombrado de la “increíble” cantidad de renuncias de residentes que hay cada año por motivos relacionados con la salud mental.
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"Este es el temido futuro de muchos profesionales dentro del ámbito sanitario. La salud mental es lo más importante y no hay negociación"
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“¿Por qué para cumplir una meta se tiene que pasar por tanta
humillación y castigos? Todavía habrá algunos que se pregunten la razón del por qué no haces una determinada especialidad si la retribución económica es buena. Como si solo fuera escogerla y ser especialista mágicamente”, ha criticado.
Para concluir, otra médica ha advertido de que este “es el temido futuro de muchos profesionales” dentro del
ámbito sanitario. “La salud mental es lo más importante y no hay negociación. No importa lo que sea”, ha concluido.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.
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