Por qué es clave "encerrar a gatos y perros" en una urgencia domiciliaria

Cuando los sanitarios acuden al domicilio a atender una consulta de urgencias, a menudo tienen que lidiar con diferentes aspectos externos que dificultan su labor. Uno de ellos son los animales domésticos, como perros o gatos, que residen en el hogar de los pacientes, un ser querido más de la familia que puede ser un problema a la hora de la intervención sanitaria.

Una facultativa ha explicado en redes sociales los motivos por los que los animales deben ser encerrados durante la visita de los sanitarios de emergencia. En un hilo publicado en Twitter, que ha generado una gran contorversia, esta especialista ha aclarado que no se trata de un capricho, sino de las consecuencias que puede llevar que un animal anden a su gusto por un lugar en el que se atiende a un paciente cuya vida puede estar en peligro. 

"En muchos de los domicilios a los que vamos a atender una emergencia tienen animales. Y muchas veces sueltos. Solemos pedir a los dueños que, por favor, aten o encierren a sus animales porque nos dan miedo o nos molestan o distraen para trabajar. Y mucha gente no lo toma bien", expone antes de enumerar los numerosos motivos que les llevan a pedir esta acción a los familiares que se encuentran junto al paciente que deben atender, sobre todo si ladran o maullan haciendo un ruido que interfiere en la conversación con el paciente y la familia, así como al auscultar y explorar.

"Quiero explicar los motivos por los que pedimos que encierren a los animales. Aunque esa sea su casa, y ellos sean uno más de la familia, y nosotros los 'invasores'.  Y vaya por delante que a mí me encantan. Tengo perro, mi padre era veterinario, me gustan muchísimo". Sin embargo, la presencia de perros o gatos en esta situación puede ser controvertida puesto que "hay sanitarios que tienen alergia al pelo de los animales. Es ver pasar un gato y pasar el resto de la guardia tosiendo, estornudando y con picor en los ojos. No podemos evitar el pelo que haya en la cama o los sofás, pero si el animal no está cerca los efectos serán menores".

Hay sanitarios que tienen alergia al pelo de los animales.

Es ver pasar un gato y pasar el resto de la guardia tosiendo, estornudando y con picor en los ojos.

No podemos evitar el pelo que haya en la cama o los sofás,pero si el animal no está cerca los efectos serán menores.

— RCP desde mi cole (@RCPdesdemicole) December 28, 2022

Sanitarios con miedo a los perros o gatos

Además, "hay personas que tienen miedo a los animales. Puede ser fundado o irracional. Pero si tienen miedo, está claro que no van a prestar al paciente el 100 por cien de su atención. Por favor, anteponed lo mejor para el paciente al bienestar del animal en esos minutos en los que actuamos". En este sentido, recuerda una mala experiencia por la que "aún tengo pesadillas con el día que nos abren la puerta y salen tres pitbull y nos empujan a la enfermera y a mí contra la pared para olernos, aunque 'no hacen nada'...".

Otros motivos que expone esta especialista son que a veces los animales ingieren los medicamentos que los sanitarios portan en los maletines o se suben al monitor con el que hacen electros y miden la tensión y la saturación, en especial los gatos. Además, han tenido problemas al trasladar a algunos paciente al hospital porque los animales se han escapado y han sido atropellados o se han perdido, motivo por el que incluso han sido denunciados.

-Policías interviniendo en el aviso por el desborde de nervios o el escándalo que se monta a veces.

-Incluso una denuncia al personal de la UVI móvil porque el animal se había escapado por nuestra culpa.

Encerrar de entrada al animal evitaría todo esto...

— RCP desde mi cole (@RCPdesdemicole) December 28, 2022

La sanitaria cierra el hilo agradeciendo la compresión de todos. "No es por capricho, sino buscando lo mejor para el paciente y para el equipo que lo va a atender.  Con suerte, solo serán como mucho 15 minutos.  Gracias".