MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
Un equipo de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) ha demostrado, en un trabajo publicado en el 'Journal of Ethnopharmacology', que moléculas aisladas de la especie vegetal 'Daemonorops draco', 'Sangre de Drago', tienen actividad antiinflamatoria, cicatrizante y antimicrobiana.
Los expertos vienen trabajando desde 2018 en el aislamiento de moléculas de 'Daemonorops draco (Willd) Blume', una especie vegetal perteneciente a la familia 'Arecaceae' y nativa de Asia. Las muestras fueron recolectadas del noreste del condado de Jixian, Tianjin (China), donde ha sido utilizada por las tribus Momok, Anak Dalam y Talang Mamak como remedio tradicional para el tratamiento de heridas cutáneas, gracias a sus propiedades antihemorrágicas y antiinflamatorias.
Ahora, el equipo de la UAM ha descrito el proceso de aislamiento y caracterización de las moléculas 'Bexaroteno', 'Taspina' y '2-hidroxi-1-naftaldehído isonicotinoil hidrazona', y su actividad biológica sobre las líneas celulares NIH3T3 (fibroblastos) y HaCaT (queratinocitos).
De acuerdo con los resultados, todos los compuestos mostraron una actividad inhibidora de NF-kB, siendo el compuesto 'Bexaroteno' el más activo con valores de IC50 entre 0,10-0,13 micrométros, superando incluso el control positivo 'Celastrol'.
Asimismo, todos los compuestos mostraron un efecto activador de Nrf2, destacando el compuesto 1 con valores de CE50 entre 5,34-5,43 nM. Además, con respecto a la actividad pro-proliferativa, el compuesto 'Bexaroteno' mostró una capacidad del cien por cien, igualando al control positivo FSB 10 por ciento.
Finalmente, todos los compuestos mostraron actividad antimicrobiana, siendo el compuesto 'Bexaroteno' el más activo con valores de MIC de 0.12-0.16 micrometros, en las cepas de 'S. aureus', 'E. coli' y 'C. albicans', superando al control positivo 'Ofloxacina'.
INFLAMACIÓN Y PRODUCTOS NATURALES
La piel es uno de los órganos más importantes para el ser humano, ya que constituye la primera barrera de defensa. Por ello, está continuamente expuesta a todo tipo de agentes externos que desencadenan una serie de reacciones inflamatorias.
Cuando se produce una lesión en la piel, se inicia un proceso de curación, con el objetivo de reparar y regenerar los tejidos dañados. Este proceso se puede dividir en cuatro etapas: coagulación, inflamación, proliferación y maduración.
En el estadio de la inflamación, existen reportes sobre el papel de las citoquinas pro-inflamatorias liberadas por macrófagos en la regulación positiva de reacciones inflamatorias y en el proceso del dolor patológico. En este sentido, la actividad pro-proliferativa se acelera mediante una adecuada regulación temporal descendente de los niveles de citoquinas pro-inflamatorias.
Dentro de las citoquinas, la citoquina NF-kB tiene un papel crucial en la patogenia de varias enfermedades inflamatorias. Por otra parte, se demostró que los queratinocitos del epitelio híper-proliferativo de las heridas cutáneas expresan fuertemente Nrf2 (proteína implicada en la reparación de tejidos) sinterizándose con otros factores de transcripción como NF-kB, lo que permite el proceso pro-proliferativo.
Finalmente, la infección es una de las causas importantes del retraso en la cicatrización de las heridas; por lo tanto, se debe considerar cuidadosamente el control de infecciones para curar heridas.
Diferentes estudios se han centrado en las propiedades pro-proliferativas de productos naturales con propiedades antiinflamatorias, antimicrobianas y de síntesis pro-colágeno. Entre las plantas medicinales con actividad pro-proliferativa, antiinflamatoria y antimicrobiana, se ha estudiado la especie vegetal denominada 'Sangre de Drago' debido a su uso tradicional en diferentes culturas (Egipto, China, India, Sudamérica). Entre las diversas especies identificadas como 'Sangre de Drago' se encuentran las especies de los géneros 'Croton', 'Dracaena', 'Pterocarpus' y 'Daemonorops'.