MADRID, 25 (EUROPA PRESS)
El Sindicato de Enfermería (Satse) ha criticado la labor del ministro de Sanidad, Salvador Illa, durante la pandemia de COVID-19, con errores como "falta de previsión, planificación y coordinación" con el resto de administraciones o la falta de protección de los profesionales sanitarios durante la primera ola.
Illa dejará este martes el Ministerio, tras la celebración del Consejo de Ministros, con el fin de centrarse en la campaña electoral de las elecciones catalanas. Será además mañana cuando el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anuncie su sustituto.
"En su labor al frente del Ministerio en la lucha contra la pandemia, hemos constatado, entre otros errores, falta de previsión, planificación y coordinación con el resto de administraciones sanitarias en distintos momentos que propiciaron que la necesaria respuesta conjunta ante la crisis sanitaria no fuese la necesaria. Los enfermeros y fisioterapeutas, así como el conjunto del personal sanitario, tuvieron que luchar desprotegidos, saturados, exhaustos y sin los necesarios recursos humanos y materiales durante mucho tiempo", denuncia Satse en declaraciones a Europa Press.
Por otra parte, la organización sindical apunta que la gestión de Salvador Illa al frente del Ministerio de Sanidad ha estado centrada "en exclusiva" en la pandemia, lo que ha provocado que "no haya abordado necesidades muy importantes de nuestro sistema sanitario para mejorar la atención y cuidados que se deben prestar a los pacientes y al conjunto de la ciudadanía". "No se ha podido ocupar de otros asuntos importantes y necesarios para mejorar nuestro Sistema Nacional de Salud, los cuales deberá abordar su sucesor una vez se normalice la situación sanitaria y social de nuestro país", indican.
"La falta de una financiación adecuada del SNS en su conjunto, el déficit de recursos materiales, como las camas UCI, por ejemplo, o la inexistencia de una verdadera política en materia de salud pública y de prevención de la enfermedad son algunas de ellas", señalan al respecto.
Como punto positivo, subrayan su "talante moderado y prudente" y su "capacidad de diálogo y de búsqueda de entendimiento con otros responsables sanitarios en unos momentos muy difíciles". "No obstante, es cierto que ha faltado dialogo con las organizaciones que representan a los profesionales sanitarios", concluyen.