Las CCAA, listas para asumir la gestión de nuevas instituciones sanitarias

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha vuelto a reabrir en España el debate sobre la descentralización de Madrid de las instituciones del Estado y ha vuelto a plantear la necesidad de que la capital no acapare toda la presencia de los organismos públicos. La "cohesión territorial", ha defendido, requiere "descentralizar la presencia institucional" para que el Estado esté presente “en todos los territorios”. Algo que afecta de lleno a todas las instituciones que se engloban bajo el paraguas del Ministerio de Sanidad, aunque el propio Sánchez ha asegurado este lunes que el objetivo iniciar es trasladar aquellas instituciones de nueva creación a otros territorios, como por ejemplo el futuro Centro Estatal de Salud Pública. 

En este sentido, y preguntada por Redacción Médica, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, ya señaló que, en el caso de los organismos sanitarios, tan solo se contemplaría ubicar su sede fuera de la capital a aquellos que fuesen de nueva organización. De este modo, cerraba la puerta a trasladar la sede de su departamento o de otros entes como la ONT o la Aemps. En este escenario, este diario ha consultado a las comunidades autónomas para comprobar el recorrido de la propuesta realiza por el presidente del Gobierno así como su predisposición a acoger instituciones sanitarias del Estado.

Desde Madrid ya han adelantado su rechazo a la descentralización. La propia presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ha insistido en que el plan que sugiere el Gobierno central es "una majadería" y ha sostenido que el presidente del Gobierno es "el principal problema de Madrid".

En Andalucía, el presidente Juanma Moreno se ha posicionado a favor de esta descentralización, un modelo que aplica en su propia gestión. De forma pública, Moreno ha apoyado la propuesta de Sánchez, llegando a señalar en círculos más privados, tal y como ha podido saber Redacción Médica, el beneficio que este modelo supondría para el conflicto catalán.

También muestran su aprobación desde Cantabria, señalando que "en principio estamos a favor, pero el Gobierno tiene que concretar la respuesta". Una postura similar a la que ha tomado Castilla y León, desde donde se ha manifestado a este diario que está “dispuesta” a estudiar las propuestas cuando se concreten. Ene ste sentido, las fuentes consultadas añaden que Castilla y León "ya es un ejemplo de la descentralización" en la propia región. 

Por su parte, desde Extremadura han señalado a este diario que "de llevarse a cabo, aunque habría que definirlo y planificarlo bien, desde el diálogo y el consenso, permitiría obtener una fotografía más exacta de lo que es la España de hoy".

Propuestas concretas

Entre las voces más partidarias de la descentralización institucional se encuentra el presidente de la Comunidad Valencia, Ximo Puig, quien ha señalado que este sistema podría “favorecer un mayor equilibrio territorial”. Desde Valencia, Puig ha pedido la posibilidad de acoger la sede de Puertos del Estado, una institución que tendría “más sentido” en una zona marítima. En la misma línea, el presidente valenciano ha expuesto la defensa de que “el Instituto Oceanográfico Nacional no se hubiera trasladado a Madrid y pudiera estar en Vigo o que la sede de Navantia se pudiera asentar en Ferrol”. Desde Galicia también apoyan esta posibilidad, viendo con buenos ojos la posibilidad de acoger alguna institución marítima.

Las islas tampoco se han quedado al margen de la propuesta. Así, desde Canarias su presidente, Ángel Víctor Torres, ha llegado a afirmar que se trataría de un proceso "justo" solicitando que el Instituto Geográfico Nacional (IGN) tuviera sede en su región.

Murcia, Madrid y Castilla-LaMancha en contra

La oposición a la propuesta ha venido fundamentalmente de Madrid, región que se vería directamente afectada con la “fuga” de las instituciones. Pero junto a ella, destaca la contrariedad que han manifestado otras comunidades como Murcia, desde donde se ha expuesto cómo la descentralización de las instituciones “no arreglaría problemas de despoblación”, en palabras de Fernando López, presidente de la región murciana. En este sentido, desde Murcia abogan por poner el foco en un nuevo modelo de financiación autonómica que evite crear una competición entre las comunidades por “ver dónde se ponen las instituciones del Estado”.

Al igual que Murcia, Castilla-La Mancha tampoco ve tan fácil este proceso, destacando que “como concepto teórico y dependiendo de qué tipo de instituciones, la propuesta no está mal. Pero tenemos que esperar a que se plantee con mayor profundidad para poder evaluarla”. Un choque de realidad donde la región subraya que “las altas instituciones nunca van a salir de Madrid”.