España suspende en casi todos los índices de justicia social salvo sanidad

La sanidad salva la mala imagen de España en lo que a justicia social se refiere. Según el último informe europeo sobre los medidores de esta justicia entre los 28 Estados miembros, la actualidad española queda relegada al puesto 25, con suspenso en la mayoría de los indicadores escogidos. 

Sólo la sanidad consigue una nota media decente: un 7,10, superior al 5,73 que obtiene la cohesión social y no discriminación, el otro indicador que aprueba. Las cifras en salud se han movido en los últimos años, desde el 7,04 que obtenían en 2008 hasta el 7,10 actual al que ha llegado desde el 6,86 del año pasado, pasando por el 6,84 de 2011 y del 7,01 de 2014. 

La situación se vuelve sonrojante si se analiza la prevención de la pobreza, con una media de 4,19, la educación equitativa, que obtiene un 4,93 o la justicia intergeneracional, que se queda en el 4,79. La peor calificación, sin embargo, es la que se refiere al acceso al mercado laboral, donde España se queda en un raquítico 3,75. 

Suspenso 'social'

En general, la media española se sitúa en el 4,76, cuarto puesto por la cola y lejos del 5,75 que se ha obtenido entre los 28. 

Según el informe, la situación de España ha empeorado desde que se elaboró el primer informe en 2008. Pese a la recuperación económica, el acceso al mercado laboral está lejos de ser inclusivo, especialmente para jóvenes y para parados de larga duración. De hecho, resalta que la cifra de paro para la población entre 15 y 24 años es la segunda más alta de la Unión Europea, y recuerda que en 2015 el 34,4 por ciento de los niños y jóvenes rozaban la pobreza y el riesgo de exclusión.