Jesús Vicioso Hoyo. Madrid
“El Consejo de Estado no formula objeciones de fondo”. Así concluye el dictamen del ente presidido por José Manuel Romay Beccaría en relación al proyecto de actualización de las listado de enfermedades de declaración obligatoria (EDO), recientemente aprobado.
José Manuel Romay Beccaría, presidente del Consejo de Estado.
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El documento hace un amplio repaso sobre el procedimiento realizado por el Ministerio de Sanidad a propósito de la renovación de un corpus de 1995 que, según el equipo departamental, no responde a la “situación epidemiológica actual de nuestro país y a los requerimientos internacionales”, por lo que se requería una modernización al respecto.
Tras estudiar los informes de informes de las secretarías generales técnicas de los Ministerios de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, y de Economía y Competitividad, así como la Secretaría General de Sanidad y Consumo y la Dirección General de Coordinación de Competencias con las Comunidades Autónomas y las Entidades Locales del Ministerio de Hacienda, el Consejo de Estado no ha encontrado reparo alguno a la tramitación que siguió adelante, tras pasar por Comité Consultivo y el pleno del Consejo Interterritorial del SNS.
Además, tal y como recuerda el dictamen, esta actualización del registro de las EDO (que pasan de 33 a 60) no supone un impacto económico y que en caso de que necesitarse adaptación de las herramientas y desarrollos informáticos, el Instituto de Salud Carlos III los puede proveer “para aquellas CCAA que los soliciten sin costo para las mismas”, según reza en el texto.
En conclusión, el Consejo de Estado da su visto bueno al proyecto recién aprobado sin objeciones, “tratándose de un desarrollo normativo eminentemente técnico”.
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Acceda al dictamen del Consejo de Estado
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