El ministro de Sanidad, Salvador Illa.
El
Consejo Interterritorial del SNS ha aprobado una
estrategia sanitaria para la fase de transición de la pandemia de coronavirus Covid-19. En ella,
las comunidades autónomas tienen que remitir al
Ministerio de Sanidad un informe con
cuatro 'áreas' estratégicas cumplidas para pasar de fase. La capacidad de
Atención Primaria de cada región es clave para esa desescalada.
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En este sentido, las comunidades deberán explicar las
estrategias que van a llevar a cabo en Primaria para garantizar la
capacidad diagnóstica con PCR de todos los casos con síntomas compatibles con Covid-19; así como para atender a positivos con medidas de prevención y control. Por ejemplo, si se van a establecer
circuitos diferenciados, cómo se va a llevar a cabo la atención domiciliaria, etc.
Este documento, al que ha tenido acceso
Redacción Médica, consta de
cuatro apartados para valorar capacidades sanitarias: la
asistencial, tanto de Atención Primaria como Hospitalaria; la alerta y
vigilancia epidemiológica; la identificación y contención de las
fuentes de contagio; y las medidas de
protección colectiva.
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En cuanto al primer punto, además de Primaria se aborda la asistencia en hospitales. En este aspecto, se tendrá que detallar un plan de preparación con acciones para el incremento rápido de capacidades; y los indicadores de ocupación de
camas de agudos y de UCI. También en este punto se engloba explicar las
reservas de materiales de protección personal y el número diario de PCR que los
laboratorios de la región pueden realizar.
Los 'rastreadores' para identificar contactos de Covid-19
En la segunda área, en la que intervienen los profesionales que dedican
a la vigilancia epidemiológica, también conocidos como
'rastreadores', las comunidades tendrán que explicar qué sistemas de información tienen, por ejemplo, los procedimientos para la recogida y volcado automático de datos individualizados de los casos, existencia de
fuentes de información alternativas como apps y
volumen de consultas a teléfonos de información, entre otras.
También tienen que detallar
si tienen capacidad para disponer en los servicios de salud pública de la información diaria para la detección de casos y el número exacto de 'rastreadores'.
Sobre el tercer punto, la localización de las fuentes de contagio, las regiones tendrán que describir el procedimiento establecido para el
diagnóstico temprano, por ejemplo, si está basado en Atención Primaria o si está apoyado en tecnología. También deben
incluir los dispositivos existentes para el aislamiento de casos que no puedan hacerlo de forma efectiva en su domicilio.
Asimismo, tienen que explicar los planes específicos para centros como
residencias de mayores y otros centros socio sanitarios y su
coordinación con el sistema asistencial.
Medidas de contención regional frente al coronavirus
Por último, en el área cuarta de deben detallar las medidas de promoción de la salud y prevención para reducir la
transmisión del coronavirus en la comunidad, tanto las que ya están implementadas como las que se planea poner en marcha en el futuro.
Además de describir las medidas de control de la movilidad que se podrían instaurar entre este territorio, como
restricciones al transporte por carretera, controles de tráfico, cierre de carreteras, etc.
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