Un estilo de vida saludable reduce el riesgo de padecer problemas oculares

Los ojos son una parte de nuestro organismo con una alta actividad metabólica y necesidad de riego sanguíneo, por lo que todo lo que afecte al estado general de nuestra salud, en sentido positivo o negativo, afectará a nuestra vista. Un estilo de vida saludable será la base sobre la que construir una buena salud ocular. Con motivo del Día Mundial de la Salud Ocular, expertos de Miranza ofrecen sus recomendaciones para contribuir a mantener nuestro bienestar ocular a partir de los últimos datos obtenidos en el II Barómetro de Bienestar Ocular de la Población Española.

Existe evidencia científica sobre el papel de un estilo de vida saludable en la disminución de las probabilidades de padecer diversos problemas oculares, a través de mantener una dieta adecuada, evitar el tabaco y el alcohol, practicar ejercicio físico o seguir el tratamiento correcto en enfermedades como la diabetes o la hipertensión. Así lo señala María Gessa, oftalmóloga de Miranza especialista en córnea, catarata y cirugía refractiva y oculoplástica. “Factores como el estrés afectan seriamente al sistema cardiovascular y esto, a la larga, deteriora la función de los ojos. Por su parte el tabaquismo está asociado a una mayor incidencia de glaucoma, cataratas y degeneración macular”, añade la especialista.

No obstante, según el II Barómetro de Bienestar Ocular de la población española, realizado a un total de 1.000 personas, no existe una clara percepción entre la población sobre la importancia de los hábitos saludables en la vista, según refleja el hecho de que solo el 40 por ciento de encuestados aprecia una correlación significativa entre su salud ocular y factores como dormir poco, el clima, fumar o beber, dieta poco equilibrada o llevar una vida sedentaria.

“Nuestros ojos están diseñados para una vida paleolítica: vida en exterior, visión lejana y ejercicio intenso. La realidad actual es bien distinta y buena parte de la población lleva una vida sedentaria con un excesivo uso de pantallas, fijando la vista en un ordenador durante 8 horas o más”, señala Jaime Aramberri, oftalmólogo de Miranza y especialista en cirugía de catarata-presbicia y cirugía refractiva.

“A ello hay que añadir que muchas personas están enganchadas al móvil y a la tablet en sus ratos libres y que toda esta actividad se desarrolla en interiores climatizados con una humedad ambiente muy baja. La consecuencia es un ojo seco funcional y síntomas de fatiga visual que se denomina síndrome visual informático”, concluye el especialista.

Combatir la fatiga visual con la regla 20-20-20

Ante esta situación, los expertos de Miranza recomiendan parpadear con frecuencia (ser conscientes de la frecuencia de parpadeo), lubricar nuestros ojos con lágrimas artificiales cada cierto tiempo, trabajar con la iluminación adecuada y optimizando el tamaño de la pantalla y la letra, así como descansar periódicamente la vista, siguiendo la regla 20-20-20, que equivale a descansar cada 20 minutos, durante 20 segundos, mirando a 20 metros (a lo lejos).

Por otro lado, tal y como constatan los expertos de Miranza, el estrés afecta seriamente al sistema cardiovascular y esto a la larga deteriora la función de los ojos. Así, según el II Barómetro de Bienestar Ocular de la Población Española, la población que se reconoce estresada opina que su salud visual es aceptable en un 69 por ciento, frente al 81 por ciento de los que dicen no sufrir estrés, lo que pone también sobre la mesa el estrés como factor de riesgo importante a tener en cuenta en el bienestar ocular. Aunque en menor medida, también parece que las pocas horas de sueño disminuyen dicho bienestar, ya que el 78 por ciento de los que afirman dormir suficiente se muestran bastante o muy satisfechos con su salud ocular, frente al 67 por ciento de los que dicen no dormir suficientemente.

Visión y patologías previas

Igualmente, los especialistas de Miranza recuerdan que, si se padece determinadas enfermedades es necesario extremar su cuidado para mantener una buena salud ocular, como en el caso de la diabetes o la hipertensión. “Una diabetes mal cuidada puede acabar fácilmente en ceguera por afectación del riego ocular. Si mantienen el azúcar a raya disfrutarán de una buena visión toda la vida. Igualmente, el tabaquismo está asociado a una mayor incidencia de glaucoma, cataratas y degeneración”, destaca Gessa.

Decálogo de la salud ocular

Según los datos del II Barómetro de Bienestar Ocular, el Índice de Bienestar Ocular de los españoles es de 5.24 sobre 10, un aprobado justo que se convierte en suspenso en la franja de edad de los 41 a 65 años, con un 4.93.

Este índice combina la percepción de salud ocular y calidad visual que tienen sobre sí mismos los encuestados (con unas calificaciones promedio de 5.83 y 6.11, respectivamente), con factores más objetivos, como su dependencia de ayudas ópticas, la dificultad a la hora de desarrollar actividades y la existencia de síntomas o problemas oculares diagnosticados, entre otros aspectos.

A este respecto y con motivo del próximo Día Mundial de la Visión (13 de octubre), los expertos de Miranza han elaborado el decálogo de la salud ocular, con recomendaciones y consejos básicos que contribuyen a preservar nuestra visión y a aumentar el actual Índice de Bienestar Ocular:

1. Llevar un estilo de vida saludable: alimentación sana, hidratación correcta, dormir bien, no fumar y ejercicio físico
2. Usar corrección óptica adecuada, comprobando la graduación anualmente
3. En caso de usar lentillas: realizar un mantenimiento e higiene correctos
4. Utilizar protección ocular en actividades de riesgo: deporte y laboral
5. Prestar atención a los antecedentes familiares de patología visual
6. Trabajando con pantallas, realizar un parpadeo consciente, lubricar la superficie ocular y descansar la vista unos segundos cada 20 minutos, mirando a lo lejos
7. Protegerse del sol con gafas homologadas frente a la radiación ultravioleta
8. Agendar revisiones oculares en el oftalmólogo con la frecuencia adecuada
9. Consultar de forma urgente si hay síntomas oculares: pérdida de visión, destellos, visión borrosa, dolor ocular, etc.
10. Ponerse en buenas manos, con un equipo médico experimentado y súper especializado con una buena dotación tecnológica