La revolución digital en la información médica ha llevado la Medicina desde la precisión hacia la prevención. Además, la
integración de los datos ómicos, que son todos aquellos referidos a disciplinas como la
genómica, la
metagenómica o la
proteómica, ha supuesto la última evolución del big data sanitario. Esta integración, la inteligencia artificial y los
algoritmos de análisis de datos han sido algunos de los temas clave de la 14 reunión internacional sobre Investigación Traslacional y Medicina de Precisión que ha llevado por título 'Big Data: integración de ómicas, imagen y datos clínicos', y que ha tenido lugar en el aula magna del
Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz este miércoles.
Los datos 'ómicos' son todos aquellos que provienen de disciplinas como la genómica o la proteómica
|
“La velocidad del cambio va unida a nuestra capacidad de adaptación” ha señalado
Josu Rodríguez, gerente adjunto de la Fundación Jiménez Díaz, a la vez que ha recordado que algunos proyectos, como Watson, ya están ofreciendo diagnósticos que cuentan con “cuatro veces mayor precisión” que las formas tradicionales. Actualmente hay algoritmos que pueden “analizar 54 marcadores biológicos en segundos”, ha señalado el gerente adjunto. “La tecnología y el big data se alían para ayudarnos a tomar decisiones cada vez más fiables y más ágiles, reduciendo la variabilidad clínica”, ha enfatizado.
Análisis de datos
“El análisis de datos de modo agregado permite conseguir resultados que de otro modo serían imposibles”, ha señalado
Carmen Ayuso, jefe del departamento de Genética de la Fundación Jiménez Díaz, que ha recordado algunos de los proyectos de integración de datos que se están llevando a cabo en nuestro país, y la necesidad de establecer protocolos y estructuras capaces de manejar esos datos.
Por su parte,
Federico Plaza, vicepresidente de la Fundación Instituto Roche, ha explicado que el reto al que se enfrenta la Medicina es "intercambiar, compartir e integrar” los datos. La cuestión, ha resaltado, es cuáles son los datos se pueden integrar y para qué. Así, datos procedentes de las diferentes "ómicas, de las tecnologías de imagen y de los hábitos de vida", servirán no solo para alcanzar un nuevo concepto de diagnósticos y tratamientos digitales, sino para “optimizar los recursos del sistema”.
Del mismo modo,
Ángel Blanco, director de organización, procesos y Tecnologías de la Información y la Comunicación del grupo Quironsalud ha señalado que la materia para trabajar está ahí. “Disponemos de millones de datos de 15 millones de pacientes”, ha explicado. Pero la cuestión es que “los datos son para hacer algo con ellos”.
Toma de decisiones
Además, la importancia de los datos para la toma de decisiones clínicas es otro de los factores de importancia, especialmente cuando, según ha indicado
Jesús García-Foncillas, jefe de Oncología de la Fundación, se está “introduciendo cada trimestre un fármaco nuevo”. Así, los nuevos tratamientos contra el cáncer y comprobar su efectividad dependerá en gran medida de la implantación de estas nuevas tecnologías, que son el futuro de la medicina.
De hecho, tal como ha señalado el gerente adjunto de la Fundación, todas estas tecnologías servirán para "la predicción y la prevención del desarrollo de patologías futuras", algo en lo que ya "están trabajando" en Quironsalud.
Aspecto de la sala durante la inauguración.
|