Óscar López, ministro de Función Pública.
El desenlace de las negociaciones para sacar adelante el nuevo convenio sanitario de Muface está aún en el aire, aunque el Gobierno solo contempla un horizonte en el que haya acuerdo con las aseguradoras. “No hay otro escenario”,deslizan voces autorizadas del Ministerio de Función Pública que ni afirman ni desmienten que se vaya a ofrecer una prima más elevada que la aprobada a comienzos de mes, del 17,1 por ciento. Las fuentes consultadas por
Redacción Médica abogan por ir
“paso a paso” en los contactos con
Adeslas, DKV y Asisa, cuyas reivindicaciones catalogan de
“legítimas”, aunque subrayan que el Ejecutivo ya ha hecho “un esfuerzo grande” al reforzar en tres puntos su propuesta inicial. Por el momento, desde el departamento sugieren que la situación se mantiene sin cambios y sin una contraoferta cerrada de las compañías.
El Boletín Oficial del Estado (BOE) ratificó este mismo sábado el
anuncio de licitación del concierto de Muface (la Mutualidad de Funcionarios Civiles del Estado) para el bienio 2025-26, que conlleva un aumento de la prima del 17,1 por ciento respecto al actual contrato. Son aproximadamente 300 millones de euros más, deslizan desde Función Pública, que inciden en el
“esfuerzo” que se ha hecho para mejorar la propuesta inicial, del 14 por ciento.
“Siempre que ha habido una negociación con el convenio de Muface ha habido esas tensiones, es normal”, subrayan estas mismas fuentes, que reiteran que se trata de la “mayor oferta de la historia”.
“Decir que no…”.
Lo cierto es que, por el momento, las negociaciones se mantienen encalladas.
Las compañías aseguradoras rechazaron tanto la propuesta inicial del Gobierno como la del 17,1 por ciento que se aprobó posteriormente en Consejo de Ministros. No obstante, todavía existe la opción de que puedan sugerir al Gobierno una
contraoferta que permita contentar a todas las partes (la primera que realizaron ascendía hasta el 40 por ciento).
Tal y como avanzó
Redacción Médica,
Adeslas, DKV y Asisa son conscientes del “esfuerzo” realizado por el Ejecutivo central, aunque insisten en que la partida aprobada es insuficiente para
“sostener” la sanidad de 1,5 millones de funcionarios.
Según sus cálculos, el actual concierto de Muface les supone unas
pérdidas de 200 millones de euros cada año. Unos ‘números rojos’ que, asumen, harán “imposible continuar en el próximo concierto".
El límite temporal que tienen estas compañías para responder es el
5 de noviembre. Concretamente, las 10.30 horas. Por el momento, fuentes de la negociación detallaron a este periódico que en estos momentos se siguen estudiando los pliegos de Moncloa.
División en el Gobierno sobre el modelo Muface
Nadie en el Gobierno ni en las Cortes Generales permanece ajeno a estas negociaciones, que se producen con el
debate sobre el propio modelo de Muface en el trasfondo. Entre los más críticos se encuentran los dirigentes de Sumar, coalición que sustenta el propio Ministerio de Sanidad. “Es un
sistema anacrónico y que da unas condiciones que son diferentes del resto de los ciudadanos”, llegó a afirmar recientemente la titular del ramo,
Mónica García.
En el PSOE, no obstante, asumen que el Sistema Nacional de Salud (SNS) no puede
absorber “de golpe” la atención de todos los trabajadores públicos del Estado, y ponen en valor las virtudes del modelo.
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