Pódcast | Nueva ley del aborto: así afecta al Sistema Nacional de Salud

El Proyecto de Ley que modifica la Ley Orgánica (LO) de Salud Sexual y Reproductiva y de Interrupción Voluntaria del Embarazo tuvo la luz verde del Consejo de Ministros el pasado 30 de agosto. Las bajas por regla incapacitante, la regulación de la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) o la objeción de conciencia, son algunos de los aspectos abordados en el nuevo texto que trascienden en el día a día de hospitales y centros de salud. En este nuevo episodio del pódcast 'La Anamnesis', contamos con Adrián Mateos e Isabel Martín como redactores de las secciones de Nacional y Especialidades en este mismo medio para entender de primera mano el impacto directo de la reforma. 



Los cambios estipulados en el nuevo escrito comienzan en el ámbito formativo, dado que la reforma estipula la salud sexual como contenido educativo en los colegios e institutos así como en las titulaciones universitarias de los ámbitos de ciencias de la salud, ciencias jurídicas, ciencias sociales y educación. Además, la IVE figurará en el temario incluido en las oposiciones sanitarias.

Interrupción Voluntaria de Embarazo y objeción de conciencia

Aquellos facultativos que se opongan a realizar intervenciones abortivas podrán acogerse a la objeción de conciencia, una garantía estipulada en el proyecto. No obstante, el texto también recoge el derecho de las mujeres a solitar la IVE de manera inmediata, lo cual requiere la disponibilidad de un médico no objetor en cualquier hospital y centro de salud durante las 24 horas del día.

Este último requisito implicaría la presencia de médicos que accedan a practicar IVE en todos los centros sanitarios, algo que colocaría en una situación de desventaja laboral a los profesionales que sí se acojan a la objeción de conciencia. 

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Otro de los ejes angulares de la reforma son las bajas por regla dolorosa, un trámite burocrático que recaerá sobre los facultativos de Atención Primaria. La especialidad ya ha manifestado su descontento frente a esta nueva carga de trabajo, y desde la Sociedad Española de Medicina General (SEMG) proponen otras alternativas como la autobaja del paciente o la derivación a médicos especialistas. 

Sin embargo, desde otras especialidades como Ginecología o Urgencias, aseguran que sus competencias legales no les permiten asumir la responsabilidad burocrática de las incapacidades transitorias y que, por lo tanto, esta tarea corresponde única y exclusivamente a los facultativos de Atención Primaria.