El
Ministerio de Sanidad ha decidido finalmente declinar el contrato de compra suscrito con la compañía
Valneva para la adquisición de su vacuna contra la Covid-19. El departamento considera que al tratarse de una plataforma de
virus inactivado, la VLA2001 "no parece aportar nada nuevo a lo ya disponible".
Así lo ha señalado la directora de la
Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), María Jesús Lamas, quien considera que España ya dispone de "un amplio porfolio de vacunas contra el virus".
Hace tan solo seis días, la compañía de biotecnología francesa anunciaba la
firma de un acuerdo con la Comisión Europea para la adquisición de 60 millones de dosis de su candidata a vacuna, la cual "todavía no ha comenzado su proceso de formación". En total, Valneva se comprometía a suministrar 24,3 millones entre los Estados miembro durante el segundo y tercer trimestre de 2022 y hasta 33 en 2023 en caso de ampliar el contrato.
La compañía gala queda fuera así de los cinco nuevos acuerdos alcanzados por el Gobierno con el resto de farmacéuticas (
Pfizer, Moderna, Novavax y Janssen) para la compra de más de
163,4 millones de dosis que garanticen el stock de vacunación hasta 2024. En el caso de las dos primeras, el acuerdo ya no se hará con cargo a los fondos de emergencia habilitados por la Unión Europea durante la pandemia.
Apuesta por las vacunas de ARn mensajero
A ello se suma la
compra de 2,4 millones de dosis de Pfizer a Polonia en agosto, como parte del acuerdo de redistribución y reventa de vacunas trazado por el Consejo Rector de la UE, con el objetivo de aprovechar todas aquellas dosis adicionales que países como este "no iban a poder utilizar dentro del periodo de vida útil del fármaco".
En 2020, España formalizaba otros cinco acuerdos con
Janssen, BioNTech-Pfizer, Moderna y Curevac para recibir 124,2 millones de vacunas contra la covid. Más de 23 millones, sin emabargo, quedaron descartadas cuando esta última empresa decidió retirar su solicitud de autorización en la Agencia Española del Medicamento (EMA) porque el resultado clínico no "había sido satisfactorio".
Desde la Aemps consideran que se ha demostrado lo "acertada" que ha sido su decisión de
apostar por las vacunas de ARn mensajero, entre las 3 plataformas disponibles, tanto en la estrategia europea como a la hora de coordinarse y trazar pactos en el seno europeo.
"Tenemos la tranquilidad de que cualquier eventualidad que se produzca en el proceso de vacunación, como la
necesidad de una tercera dosis, vacunar a la población pediátrica o la aparición de variantes con escape inmunológico, va a estar cubierta", aseguraba Lamas durante su exposición, señalando directamente al suministro pactado con Pfizer y Moderna. En el contrato actual para 2023, Europa contempla
1.440 millones de dosis, de los cuales, 281 millones irán para la campaña española.
380 millones de vacunas covid fabricadas en España
Dichos contratos de compra incluyen además una
cláusula de donaciones. Un proceso "extramadamente complejo", apunta Lamas, que supone una "maquinaría de relojería" para garantizar que se cumplan los plazos de receptores y países donantes.
"Podemos estar satisfechos de afirmar que formamos parte de la región que más vacunas exporta al mundo", aseguraba Lamas, que pide "tener altitud de miras" y no solo ayudar a "proteger a profesionales sanitarios y población vulnerable" en terreno nacional, sino también en todas las regiones sin acceso a la cadena de producción.
Para ello, apunta Lamas, es necesario dotarles de una capacodad de producción mediante la "formación de profesionales". Aunque lo ideal es que cada país fuera capaz de fabricar sus suministros, la transferencia tecnológica resulta "muy delicada" ya que "no puede haber cambios en la calidad del producto final y cualquier varible puede modificarlo".
"No todos los países están en capacidad de recibir las dosis que se ofertan a través de Covax", asegura Lamas, teniendo en cuenta la fecha de caducidad "cortos" de las dosis. Por tanto, la vacunación en estos países no solo depende de tener viales disponibles sino de que estos tengan la capacidad de desplegar la vacunación dentro de su país".
Echando la vista atrás, la responsable recuerda que la estretegia de vacunas europea está basada en un modelo de "
compartir riesgos con investigadores y desarrolladores". La fabricación anticipada de fármacos, "antes incluso de conocer los resultados de los ensayos clínicos", es lo que ha permitido que se puedan utilizar "masivamente de manera casi inmediata".
España, en concreto, participa en la producción de
4 de las 7 vacunas de la estrategia de la UE. En lo que llevamos de año, han salido de suelo español 380 millones de dosis contra el coronavirus: 220 millones de dosis de vacunas de ARn y 160 millones de adenovirus. Todo gracias a la "cadena de suministro sólida" que se ha creado "en tiempo récord", la cual, ha permitido "no solo desplegar la campaña más ambiciosa de la hisotria sino la exportación de más de mil millones de vacunas a más de 50 países".
"Gracias a esta
colaboración público-privada, hoy nuestro tejido productivo es mucho mejor que hace un año", destacaba Lamas, convencida de que "fortalecer estructuras propias es uno de los grandes aprendizajes que ha dejado la crisis".