David Peña Otero y Yolanda Martín en el 29ª Congreso de Separ.
Llevar a cabo una
adecuada acción asistencial sanitaria radica en las
referencias y
evidencias que posee el especialista, pero ¿y si estamos provocando más
efectos adversos de los que esperábamos? La 29ª Reunión de Invierno de
Separ ha celebrado el taller ‘
Mitos en cuidados respiratorios’ para ir un paso más allá de las referencias conocidas a la hora de tomar una decisión, ya que, en muchas ocasiones, el nivel de
evidencia es prácticamente nulo.
David Peña Otero, enfermero del Hospital Marqués de Valdecilla, desvela los efectos adversos que generan los mitos en la calidad asistencial.
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David Peña Otero, enfermero del Hospital Marqués de Valdecilla; y
Yolanda Martín, enfermera del Complejo Asistencial de Zamora, defienden en
la Reunión de Invierno de Separ la necesidad de que los especialistas se hagan
preguntas y sean más
críticos a la hora de evaluar cualquier tipo de acción ligada a la
calidad asistencial sanitaria. “Cuando estamos en la práctica clínica y cogemos un producto, ¿llegamos a decir: "no, no vamos a utilizarlo porque no sabemos"? El
10 por ciento de los pacientes atendidos en el hospital
mueren por un error. No podemos estar tranquilos con estos datos”, detalla Peña.
Peña: "La mayoría de efectos adversos que van a afectar a una persona son evitables"
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Otro escenario en el que el enfermero ha hecho hincapié es si se llegan a asumir las
condiciones clínicas del paciente por lo que respecta a las decisiones que toma el especialista: “La mayoría de los efectos adversos que van a afectar a aquella persona son
evitables. Si lo son, algo se puede hacer. Que el sistema
no nos facilite formación, no nos deje venir a
congresos o no nos facilite el
producto sanitario que se necesita conlleva el
80 por ciento de estos errores. En el cuidado de la
Enfermería, se nos asocia un tercio de estos factores, y un
50 por ciento de este generarán una
invalidez temporal al usuario”.
Yolanda Martín, enfermera del Complejo Asistencial de Zamora.
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Los principales perjudicados en todas estas situaciones acaban siendo los
pacientes y sus
familias, pero para Peña no son los únicos que sufren las consecuencias: “Existe también un cliente secundario y terciario, que es el sentimiento de culpa que padece el propio
profesional y la
institución. Todo esto se tiene que poner sobre la mesa”.
Socrative: Evidencias y referencias
Los especialistas han presentado en la charla una aplicación móvil,
Socrative, en la que, a través de análisis de la
evidencia y las
referencias actuales, el especialista debe escoger cuál es la mejor opción ante una
situación clínica determinada. Una vez finalizado el cuestionario, la propia aplicación nos dirige a las evidencias existentes para determinar esa respuesta. “Estas referencias tienen un
nivel de evidencia bajo, algunas son de trabajos in vitro que ni siquiera estudian al paciente. Se debe potenciar la investigación”, concluye el enfermero.
La aplicación Socrative ofrece un cuestionario con respuestas que no son correctas, pese a que la evidencia actual demuestre lo contrario.
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Seguir defendiendo acciones clínicas debido a las referencias que tienen detrás no es sinónimo de realizar el trabajo de forma correcta, por lo que tanto Peña como Martín pretenden que los especialistas vayan más allá de lo que conocemos, sigan investigando y acaben hallando una respuesta eficaz, esta vez, con
evidencias irrefutables.
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