María Luisa Carcedo.
La
ministra de Sanidad en funciones, María Luisa Carcedo, ha asegurado este viernes, durante el transcurso de
la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en el que se ha aprobado la subida del 0.25 por ciento, que el caso de la
pediatra antivacunas de la
Comunidad de Madrid es un caso aislado que “no descalifica al colectivo”.
Apoyándose en el éxito de implantación del
calendario de vacunación infantil, Carcedo ha recordado que España tiene un “sistema excelente” y profesionales con una “
formación académica y científica” que hacen una gran labor en su aplicación en todo el país. “Tenemos un 9
7 por ciento de éxito en la implantación del calendario de vacunación infantil. Una de las cifras más altas”, se ha reiterado la ministra en funciones.
Por ello, para Carcedo
lo ocurrido en la comunidad es un caso aislado. Ha explicado que, si alguna persona individualmente, como sucede en todos los colectivos, “tiene una
praxis no acorde con la ética y la práctica de la Medicina” se actúa en acorde a los hechos. De esta forma, la política asturiana ha valorado positivamente la actuación del
Colegio de Médicos de Madrid. “Ha actuado con toda justicia y con todo rigor en la aplicación de su código deontológico”, ha finalizado.
Relacionaba las vacunas con el autismo
Tal y como se aseguró Colegio de Médicos de Madrid (Icomem), la inhabilitación de la profesional llega tras una denuncia que acusaba a la profesional de
vincular las vacunas con el autismo y además "promocionar
tratamientos pseudocientíficos".
Según el colectivo que interpuso la denuncia, la pediatra exponía tesis "completamente inadecuadas"
|
El colectivo
Autismo España realizó un amplio dossier informativo y trasladó en agosto de 2018 la información al
Colegio Oficial de Médicos de Madrid, que ahora ha abierto un expediente disciplinario a la profesional ante sus manifestaciones carentes de base científica.
En esta información se manifiesta que la pediatra exponía en
medios de comunicación tesis “completamente inadecuadas” acerca de la vacunación y su efecto en el origen del
TEA, y la realización explícita de recomendaciones acerca de la no vacunación de niños, personas con autismo y embarazadas.
De esta forma, el Icomem ha inhabilitado a la pediatra porque estos hechos vulneran diversos artículos del
Código de Deontología Médica, como el 21.1, que dice “el médico tiene el deber de prestar a todos los pacientes una atención médica de calidad humana y científica" y el 23.1 "el médico debe disponer de libertad de prescripción, respetando la evidencia científica y las indicaciones autorizadas, que le permit
a actuar con independencia y garantía de calidad".
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.