Exteriores del Ministerio de Sanidad.
Ministerio de Sanidad y sindicatos suben las marchas del proceso de reforma del
Estatuto Marco. De la cumbre del
Ámbito de Negociación de este lunes no han trascendido acuerdos de calibre, pero sí un "calendario intensivo" de reuniones que, si todo avanza según lo previsto, se alargará hasta junio. “Hay mucho que hacer y va a ser duro, con sesiones de mañana y tarde”, han indicado a
Redacción Médica los agentes sociales, que avanzan que en esta primera toma de contacto han estado sobre la mesa los
capítulos 1 y 3 del Estatuto, relativos a las bases reguladoras de la situación del personal estatutario de salud y a los mecanismos de
ordenación y planificación de las plantillas.
Las centrales esperaban con impaciencia la reunión de este lunes para retomar la negociación de un
Estatuto Marco que consideran
“desfasado” e incapaz de hacer frente a los cambios sociales y demográficos de la sociedad (y la sanidad) española. Los contactos se truncaron el pasado abril, cuando los representantes sindicales se levantaron de la mesa al entender que el Ministerio, entonces regentado por
José Miñones, había desestimado sus principales reivindicaciones, que pasan por una reclasificación profesional del SNS,
la actualización de funciones y la mejora de las condiciones laborales de los sanitarios con la
jubilación anticipada en el horizonte.
Las aguas parecen haber vuelto a su cauce con la administración de Mónica García, aunque los sindicatos mantienen la cautela. En este sentido,
CCOO, UGT, CSIF y CESM avanzan que la cumbre celebrada este lunes (a la que han acudido dirigentes de los ministerios de Sanidad y Función Pública) ha servido esencialmente para “calendarizar” las negociaciones que se sucederán durante los
meses de abril, mayo y dos días de junio.
La siguiente reunión, fechada el próximo dos de abril, se centrará en la discusión del capítulo uno y tres del Estatuto Marco. El primero de ellos es el referente a las normas generales, y el tercero recoge la
planificación y ordenación del personal.
“Hay mucho que hacer y el calendario hasta junio va a ser duro, con sesiones intensivas de mañana y tarde”, explica a este respecto el responsable de Sanidad de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF),
Fernando Hontangas, quien viene advirtiendo de la necesidad de dar respuesta a "reclamaciones básicas" para la sanidad como la provisión de puestos, la movilidad geográfica, la carrera profesional, la jornada de 35 horas y el derecho a la jubilación anticipada.
Demandas de los sindicatos en el Estatuto Marco
Desde UGT, Ana Francés, secretaria federal del sector Salud, Sociosanitario y Dependencia, insiste en la necesidad de “darle celeridad a las negociaciones”. “
No se pueden dilatar ocho meses más. Esta es una segunda vuelta y debe ir mucho más rápido”, señala. Por su parte, subraya que UGT también mantiene las reivindicaciones que han presentado hasta la fecha, aunque da
especial importancia a la reclasificación profesional.
Según Francés, la petición de UGT será la de abordar el capítulo dos, referente a la reclasificación profesional, en una única reunión, ya que esta requiere “un
mayor debate”. Además, añade que su intención es que esta no se dilate hasta el último momento. “Lo dejaremos para más adelante, pero eso no significa que se quede para el final de la negociación”, comenta.
Por su parte, el responsable de Empleo de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO (FSS-CCOO),
Jesús Jordán, traslada a este medio que sus líneas reivindicativas siguen siendo las mismas que desde que la negociación quedara paralizada antes de las elecciones generales: "
Jubilación parcial y anticipada, reclasificación profesional según el
artículo 76 del Ebep con encuadre en el Marco Europeo de Cualificaciones, la actualización de funciones, establecer una jornada básica de 35 horas y concursos de traslados abiertos y permanentes, entre otras cosas".
En palabras de
Gabriel del Pozo, secretario general de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), “parece claro que los puntos conflictivos se discutirán al final” de la negociación, previsiblemente en mayo. El facultativo incide en que hay
puntos de consenso “pero también de disenso” entre las partes, pero espera en poder alcanzar un acuerdo de máximos. “Esperemos que esté rematado en junio”, concluye.
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