La presidenta de la SEMI, Juana Carretero, analiza la situación de la especialidad tras el 44º Congreso Nacional

Juana Carretero, presidente de la SEMI.


18 nov. 2023 18:20H
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Más de 2.900 internistas se han dado cita en el 44º Congreso Nacional de Medicina Interna, que ha sido, según la presidenta de la Sociedad Española de Medicina Interna, Juana Carretero, “un éxito a nivel de asistencia, organización y ciencia”. Pese a este clímax alcanzado por la especialidad en el congreso celebrado en Valencia, Carretero tiene presente el futuro de la especialidad, recordando que dentro de 10 años “se jubilarán entre el 20 y 25 por ciento de los médicos internistas que están trabajando”. Debido a esta situación, la internista apuesta por la “redimensión de los recursos que se tienen actualmente”.

En una entrevista a Redacción Médica, Carretero también destaca que el papel protagonista del cambio climático en la salud de las personas está siendo lidiado por los internistas, a través de “la creación de una línea estratégica propia de la SEMI para hacer frente a este nuevo escenario”.

Juana Carretero, presidenta de la SEMI, ha defendido la "creación de una línea estratégica propia de la SEMI para hacer frente al cambio climático"


¿Qué valoración hace del 44º Congreso Nacional de la SEMI, celebrado en Valencia?

Este Congreso ha supuesto un éxito a nivel de asistencia, organización y ciencia. Pienso que incluso ha influido más el éxito científico que el de la organización. La labor de los grupos de trabajo durante todo el año de difusión y de crear material práctico para los internistas hace que la gente, los residentes, los adjuntos y las personas más mayores tengan la necesidad de venir a educarse, a formarse o a actualizarse en el congreso. Se ofrecen herramientas para el manejo del día a día. Ese sentimiento de pertenencia que hoy día tienen cada vez más los internistas a la SEMI ha hecho que se hayan congregado 2.900 personas.

El programa ha incluido muchas novedades, como la inteligencia artificial, que cada vez está más asumida como propia y los profesionales se sienten más cómodos hablando de ella. Ha habido muchas mesas y talleres de ecografía. No solamente hay talleres de manejo general de la ecografía, sino que están dirigidas a la enfermedad tromboembólica y a la insuficiencia cardiaca, para que se pueda practicar en los hospitales. La actualización de las necesidades del día a día ha hecho que se tengan más ganas de venir al congreso. Valencia ha ayudado mucho y el tiempo también.  

En el Congreso se ha remarcado el papel del especialista de Medicina Interna a la hora de abordar los retos que supondrá la atención al paciente crónico. ¿La especialidad cuenta con los recursos y la formación necesarios para poder adaptarse?

Medicina Interna está sobradamente preparada frente al abordaje del paciente crónico, debido a que se lleva tratando a este perfil de personas desde siempre. Un paciente crónico tiene multimorbilidad, convive con dos o más enfermedades crónicas a la vez. Gracias a las mejoras económicas, sociales, a la innovación y a la formación, las enfermedades que antes eran mortales cada vez permiten a las personas vivir más. La Medicina Interna está acostumbrada a tratar con estos pacientes, pero ahora se añaden nuevos condicionantes de complejidad que antes no estaban tan asumidos, como el riesgo de exclusión social debido a todos los condicionantes económicos que se tienen ahora. Este aspecto está asociado al riesgo de desnutrición, que influye más en el pronóstico de los pacientes, y al abuso del alcohol, tan normalizado por la sociedad.

Carretero ha considerado que las estrategias de cronicidad no están bien implantadas "ni a nivel nacional ni a nivel autonómico"


El 65 por ciento de los Servicios de Medicina Interna tienen un programa de atención al paciente crónico completo. Eso supone que se llegue al 28 por ciento de la población con estas necesidades. Las estrategias de cronicidad no están bien implantadas, ni a nivel nacional ni autonómico. Pese a que los Servicios disponen de estas consultas, el hecho de que no estén bien implantadas hace que sea difícil que se llegue a todas las personas.


"Las estrategias de cronicidad no están bien implantadas, ni a nivel nacional ni autonómico" 



¿El cambio climático modificará el papel de la Medicina Interna?

Cada vez se aprende más en Medicina Interna sobre este escenario. Hasta hace poco tiempo nadie pensaba que estas olas de calor iban a influir con el pronóstico de las enfermedades pulmonares, la insuficiencia cardiaca o la enfermedad renal. Ahora mismo se sabe que por cada grado y medio que sube la temperatura, aumenta la mortalidad por EPOC y la hospitalización de aquellas personas que tienen una multimorbilidad.

La SEMI está ahora mismo elaborando una estrategia con ocho internistas que van a liderar un proyecto inicialmente, en colaboración con el Ministerio de Sanidad, para hacer una línea estratégica sobre cómo influye el cambio climático. No es tanto la contaminación, sino la seguridad alimentaria que afecta a las enfermedades. Es una línea en que la SEMI está ilusionada. Durante el congreso hubo una primera reunión de trabajo y esta iniciativa va tener muchos resultados. No se puede dar la espalda a esto. Estamos a noviembre y aguantando temperaturas de 25 grados, no es normal.

El Ministerio de Sanidad ha lanzado una línea de trabajo en este campo y se pidió a la SEMI dos representantes que trabajasen en el grupo de multimorbilidad de la SEMI. A raíz de allí se ha creado una línea propia de la SEMI dirigida por la vicepresidenta de la sociedad, Montserrat Chimeno. Es importante que toda esta información se trasmita a los pacientes. El catedrático de Medicina Interna de la Universidad de Córdoba, Francisco Pérez, es otra de las personalidades que está involucrado en este proceso y dio la conferencia inaugural sobre si se debe cambiar la alimentación para poder salvar el planeta.

La presidenta de la SEMI aún no ha recibido ninguna respuesta por parte del Ministerio de Sanidad en relación al proceso de recertificación.


La SEMI puso en marcha hace un año un programa para abordar la recertificación. ¿Se ha recibido alguna propuesta por parte de Sanidad?

Actualmente no hay ninguna respuesta. La SEMI se puso a trabajar activamente con la Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas (Facme) en este sentido, pensado que era positivo, en vista de la lentitud con la que iba la propuesta del ministerio, elaborar un propio proceso de recertificación. A pesar de que existan unas competencias transversales, cada especialidad debe tener unas competencias específicas referidas a la especialidad. La SEMI ya las ha identificado y se elaboró el proceso de recertificación.

Hasta ahora no ha tenido mucha respuesta porque al no ir de la mano de Sanidad y al no ser la propuesta definitiva, muchas veces no se siente por parte del internista la necesidad de tener esta recertificación. Recientemente se acordó en la junta directiva continuar con el proceso, pero siempre teniendo presente que una vez que el ministerio inicie este proceso de la mano de Facme, SEMI estará del lado de la institución, apoyando esa iniciativa, aportando la experiencia y las competencias necesarias.

Durante su intervención en la inauguración en el congreso llegó a destacar las áreas de capacitación específica (ACE). ¿Qué áreas en concreto pretende desarrollar?

La SEMI está trabajando en ello. La sociedad, a raíz de la propuesta de creación de la especialidad de Urgencias, presentó unas alegaciones. La SEMI ha abogado siempre por un área de capacitación en Urgencias y en otras áreas de conocimiento. Fue una sorpresa para la SEMI que saliera la de Urgencias como una propuesta de nueva especialidad. Los internistas que ya trabajan en Urgencias necesitan un reconocimiento. A pesar de que no es lo más frecuente, un especialista de Medicina Interna puede tener la necesidad de trabajar en Urgencias. Se debe tener claro cuál es ese paso. Después de anunciarse la propuesta desde el ministerio, la SEMI pidió cuatro años de especialidad y luego dos años para acceder a Urgencias.

Ahora mismo, una vez se ha publicado la propuesta del ministerio de la creación de esa especialidad, han surgido múltiples alegaciones por parte de todas las sociedades científicas y casi todas las comunidades autónomas. Se están dando cuenta del problema que supone idear una especialidad a nivel de logística y personal. Lo más sencillo hubiese sido reconocer el trabajo que realizan esas personas y crear una ACE a la que se pudiera acceder desde Medicina de Familia, Medicina Interna y Cuidados Intensivos. Finalmente, no se sabe si se terminará el proyecto de ley de la creación de la especialidad de Urgencias o habrá que retroceder o volver a plantearlo. La propuesta de la SEMI es realizar una ACE.

La presidenta de la SEMI ha explicado que ya se está trabajando con las consejerías para la presentación de nuevas ACE.


¿Se ha hablado ya con el Ministerio de Sanidad sobre ello?

La sociedad ha elevado al ministerio la propuesta de ACE y se está trabajando con las consejerías para obtener las cartas de apoyo necesarias para enviarlo. La SEMI expresa su desconformidad por la forma en la que se debe notificar al ministerio. Si para presentar una ACE se necesita el apoyo de siete consejerías, si no se logra nunca se va a poder elevar una propuesta al ministerio. Sanidad nunca sabrá lo que piensan los internistas. Es una propuesta trampa, se debería permitir que se presentaran las propuestas y después se debatieran en el Consejo Interterritorial, decidiendo qué es lo que se hace. No se puede condicionar eso a la necesidad de tener siete cartas de apoyo.


"Si para presentar una ACE se necesita el apoyo de siete consejerías, si no se logra nunca se va a poder elevar una propuesta al ministerio" 



Con Enfermedades Infecciosas la SEMI ha hecho cálculos. Aproximadamente puede haber entre 550-600 médicos internistas que trabajan temporalmente en Enfermedades Infecciosas. No se necesitaría crear unidades docentes porque esas personas ya están trabajando en esos Servicios. Simplemente con acreditar a esas personas en el ACE de Enfermedades Infecciosas estaría cubierta la necesidad. No se tendría que crear a otros especialistas. El problema está resuelto y cubierto por los compañeros. Sería fácil reconocerles esto y decir que cuando un residente de Medicina Interna termine, su especialidad a los cinco años puede suponer, con dos años más, la adquisición de esas competencias que ahora tienen las personas con muchos años dedicándose a las Enfermedades Infecciosas.

¿Cómo afectará la jubilación de médicos internistas a corto plazo a la especialidad? ¿Qué medidas considera que se deberían replantear para evitar un déficit de internistas?

Ahora mismo la ratio de internistas por 100.000 habitantes está en 8,4. Hay territorios como la Comunidad Valenciana que está en 5,7. La gran dispersión geográfica en algunas zonas hace que sea imposible llegar a todas esas personas. En 10 años se jubilarán entre el 20 y 25 por ciento de los médicos internistas que están trabajando. Este año la oferta de plazas de Interna del ministerio ha aumentado a 11 más. No es suficiente, las personas que se forman como médicos tardan seis años, más el año que están preparando el MIR y los cinco años de especialidad se eleva a 12 años. En ese momento ya se tendrá un déficit impresionante de especialistas.

Es bueno que se creen más plazas, pero también es bueno redimensionar los recursos que se tienen. Que haya otros compañeros que trabajen con los internistas que podrían dedicarse no a la atención aguda del paciente, sino a hacer pruebas diagnósticas, consultas externas, etc. Se trata de dimensionar los recursos para poder asumir esa carga asistencial que se tiene. Es importante pensar que en 10 años se tendrá un 20 por ciento de internistas que ya no trabajarán, por lo que se necesita prevenir este escenario.

Pedro Sánchez ha sido nombrado recientemente como nuevo presidente del Gobierno de España. ¿Qué pediría desde la SEMI al futuro ministro o ministra de Sanidad?

Como prioridad, la SEMI defiende que no se debe fragmentar el sistema MIR, símbolo de excelencia, está avalado y es solvente. Permite la equidad de que cualquier médico en España, se haya formado en Canarias o en Madrid, pueda acceder a una plaza de formación en cualquier sitio. Si hago que Madrid tenga un MIR, Cataluña otro y Galicia otro, dónde preferirá un residente ir a formarse, ¿a Badajoz o a Madrid? Se acabará creando una mayor inequidad que ya existe. Influirá la atracción de la ciudad y habrá comunidades que pagarán más que otras, las condiciones laborales serán distintas, etc. La Sanidad nunca debe ser moneda de cambio política. La Sanidad no son votos, son personas que están enfermas y que necesitan que se dé la mejor atención.

A largo plazo, el futuro ministro o ministra no puede contribuir aún más a fragmentar la atención que se da a la persona. Se debe apostar por un perfil general Los internistas y todos los médicos generalistas como la Atención Primaria, son los únicos que pueden garantizar la continuidad asistencial del paciente crónicamente enfermo, con una multimorbilidad. No se puede permitir que esa persona esté pivotando de una consulta a otra con lo que todo esto supone, sobre todo en áreas tan dispersas y de tan difícil cobertura. Debe haber una apuesta clara del ministerio por lo general, para no fragmentar la asistencia sanitaria, que nos ayuda a sostener el Sistema Nacional de Salud (SNS).

Juana Carretero ha sido partidaria de que "no se debe fragmentar el sistema MIR ni la asistencia sanitaria".

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