Adrián Alasino, Daisy Amparo Martínez, Pilar Rodríguez Ledo y Benjamín Abarca.
La colaboración y coordinación entre los médicos de Familia españoles y latinoamericanos servirá para
fortalecer el sistema sanitario de ambas zonas geográficas. Un trabajo conjunto que servirá como ‘dique de contención’ para
futuras enfermedades que puedan amenazar el bienestar y la salud mundial, tal y como ha ocurrido con el
Covid-19. Y es que, para que exista este fortalecimiento de la Primaria interestatal, los especialistas latinoamericanos llaman a “institucionalizar” esa colaboración.
Uno de los objetivos que se ha puesto sobre la mesa en el
29º Congreso Nacional de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (
SEMG) celebrado en Granada (Andalucía), ha sido la importancia de crear
puntos de encuentro entre varios países, con el fin de ir “forjando lazos de amistad”. Ese es el primer paso antes de “institucionalizar” el proceso. “Tenemos que conocer qué está haciendo cada país y buscar cómo
darle continuidad a esta cooperación entre países, enfatizando en la importancia de la educación médica continua”, ha explicado
Leonel Argüello, presidente de la Sociedad Nicaragüense de Medicina General (
Sonimeg).
Adrián Alasino, médico de Familia y decano de la facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Mar de Plata (Argentina).
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Argüello, junto a
Adrián Alasino, médico de Familia y decano de la facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Mar de Plata (Argentina), ha participado en la mesa de debate ‘Modelos colaborativos transfronterizos con Iberoamérica’ durante las jornadas de SEMG. En ellas han conversado sobre las cuestiones que tienen que ver con las necesidades que tiene cada lugar, según ha comentado Alasino: “Nosotros en América Latina tenemos mucha necesidad de
incluir en el trabajo del profesional el entorno, dado que hay muchas inquietudes y muchas cuestiones no resueltas que requieren, además de lo biomédico,
estudiar las cuestiones de las ciencias sociales”.
Ahora, tras la oportunidad que les ha ofrecido la sociedad científico-médica española de ilustrar sus situaciones, tratan de fortalecer esta relación y de llevarlo a un próximo nivel para que dicha colaboración entre las dos regiones del globo terráqueo pueda institucionalizarse. “Intentamos aprender qué es lo que están haciendo los otros colegas con la finalidad de
incorporar las mejores prácticas. Pero no lo hacemos de forma sistemática y muchas veces los canales de comunicación son personales, no a través de las sociedades médicas”, ha añadido Argüello.
A su vez, el presidente de los médicos de Familia nicaragüenses ha subrayado que “estimula” que desde SEMG se ahonde en esta cuestión: “
Reflexionas sobre qué puede ser interesante para aplicarlo a tu país, adecuando lo que sea necesario y abriendo un camino colaborativo con el que esperamos poder seguir”.
Adrián Alasino, médico de Familia y decano de la facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Mar de Plata (Argentina)
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Escenario ‘perfecto’ de colaboración Iberoamericana
La
globalización, que ha generado una hiperconexión de un gran número de países, ha hecho que las diferentes sociedades se hayan convertido vulnerables ante enfermedades como el Covid-19, a ojos de Alasino. Para hacer frente a esta situación de debilidad social, el médico de Familia argentino ha planteado la necesidad de que el especialista del
primer nivel asistencial pueda “penetrar” en las sociedades nada vez más “individualistas”. “Necesitamos
enfoques más solidarios, cuestiones más colectivas, ver justamente cuál es la problemática que nos incluye a todos”, ha señalado.
Y es que, para lograr esa
Medicina más colaborativa, Alasino ha incidido en profundizar en la colaboración entre España e Iberoamérica. Con esa relación forjada, se podrían llevar a cabo
investigaciones conjuntas que revelen cuál es la situación de las comunidades para fortalecer el
perfil comunitario de la especialidad, tal y como ha manifestado Alasino. “El mundo transita hoy hacia una cuestión más individualista, hacia una idea en la que la persona puede resolverlo todo. Nosotros intentamos
fortalecer el modelo de Familia, que no solo tiene aspectos biomédicos, también sociales”, ha recalcado.
Argüello, por su parte, ha puesto la ‘mira’ más allá y ha llamado a ahondar en esta
relación interestatal: “Sería magnífico que después de esta actividad del Congreso pudiéramos trabajar un
plan de colaboración sostenible, con la participación de los países, con más acceso a la información y educación médica continua, para
ampliar la oferta de otros países con experiencias extranjeras”. Si bien ese es el objetivo, el especialista ha reconocido que “falta mucho por hacer”, por lo que ha animado a los participantes de la mesa de debate a que reflexionen y se incorporen a esta corriente de pensamiento dentro de la Medicina Familiar y Comunitaria (
MFyC).
La mesa de debate 'Modelos colaborativos transfronterizos con Iberoamérica'.
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