El Plan de Resiliencia, un "parche" cortoplacista y confuso para Primaria

El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, presentado recientemente por la ministra de Economía, Nadia Calviño, y que dedica un capítulo a la reforma de la Atención Primaria, no termina de convencer a las sociedades científicas de Medicina de Familia. Consideran que más que "seguir reflexionando" sobre estrategias, lo que necesitan es pasar de una vez por todas a la acción. 

"Estamos cansados y hartos de planes. Cada vez que elaboran uno en vez de más capacidad resolutiva consiguen que tengamos menos, en vez de tener más tiempo para el paciente lo reducimos... El papel todo lo aguanta y en principio suena bien, pero hay que ver cómo se plasma eso en la realidad. La esperanza que tenemos en que esto cambie es pequeña", asegura Vicente Martín, miembro de la Junta Directiva de Semergen.  

El profesional considera que llevan demasiado tiempo escuchando que son la puerta de entrada del Sistema Nacional de Salud mientras ven cómo el "gasto hospitalario sube y el de Atención Primaria baja". Para Semergen, este nivel asistencial debería llevarse un 20-25 por ciento del presupuesto. 

"Parece que somos de goma. Se habla del seguimiento de pacientes pero no se reponen sustitutos", asegura Martín, que recuerda que en los próximos años se va a jubilar un gran porcentaje de la plantilla. "Eso requiere un plan a mucho tiempo vista, y los problemas que vamos a tener no se resuelven a corto plazo. Vienen de mucho tiempo atrás", prosigue. 

"Que haya un plan serio donde importe la continuidad asistencial, donde a los pacientes les puedes dedicar el tiempo que precisan, donde contemos con herramientas diagnósticas para resolver problemas dentro de la Primaria... Y esto supone un plan de formación y de renovación", asegura. 

Tachan el plan de "confuso"

También Pilar Rodríguez Ledo, vicepresidenta de la SEMG, asegura que les "congratula que se retome de nuevo la situación", pero es "hacer una vez más después de otras tantas. Y cuando leemos la propuesta vemos que hay cuestiones que son una vuelta atrás, que lo que estaba claro no se retoma y que se mezclan temas que no tienen realmente repercusión en Atención Primaria. Nos parece que es un documento confuso donde no parece que esté clara la línea a dónde se quiere ir".

Sobre el nombre, asegura que si algo saben en Atención Primaria es de resiliencia, ya que han sido suficientemente flexibles en situaciones límites de la que han sabido reponerse. "De ahí a salir fortalecidos de este plan, que parece que no tiene un objetivo claro, no nos parece que sea un buen comienzo", añade. 

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"Texto  Nos parece que es un documento confuso donde no parece que esté clara la línea a dónde se quiere ir"

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"Hay cosas que tendrían que estar claras y al final todo se zanja en una idea clara: que no se puede reformar la Atención Primaria sin reformar el SNS. La pandemia lo ha puesto de manfiesto. Hablamos de un modelo que está agotado. Con ponerle un parche en AP no se va a solucionar, hay que abordarlo bien y con las tres líneas de siempre: recursos humanos, recursos económicos y reorganización de flujos y de trabajo". 
 
Sin embargo, cree que en el plan mezcla en los objetivos la Atención Primaria con la atención hospitalaria y la salud pública.  "Se traduce como un plan para la AP la compra de vacunas Covid o la inversión en tecnología para los hospitales. Quizá ese no debe ser el enfoque. Hay que tener claro que tener claro qué es lo que se mueve en cada sitio y cómo enlazarlo en el entorno siguiente. Y esto no parece estar claro", señala. 

El plan también menciona los marcos profesionales estables, "cuando a pesar de la gran escasez de profesionales la contratación cada vez es más inestable. No se entiende que cuando mayor es la demanda de profesionales, las condiciones laborales no mejoren. No sabemos cuál es la idea para conseguir este marco profesional estable. No se vislumbra cuando no tienes profesionales y cuando los que hay no están bien". 

Esperan ser convocados 

Está previsto que en esta reforma, que a más tardar debe estar hecho en 2023, las sociedades científicas colaboren. Pero, tal y como señala Martín, todavía no han sido convocados. "Tampoco se nos llamó para el tema de las vacunas y para muchas cuestiones. Muchas veces da la sensación de que el ministerio solo escucha a aquellos que quieren oír". 

Rodríguez Ledo señala que todas las reuniones están siendo con las distintas autonomías, pero consideran que eso solo lleva a estar en el "bucle de siempre". "Nada impide que se puedan hacer reuniones con las CCAA, pero se debe establecer unos mínimos comunes a todas las autonomías con Sanidad", asegura. Aunque luego, prosigue, se incorporen distintos matices según el territorio.